---

Número 13, Año 4, Enero - Marzo 1999

---

| Número del mes | Anteriores | Contribuciones | Sobre la Revista | Sitios de Interés | Directorio | Ediciones Especiales |

---

EZLN Y LA GUERRA EN INTERNET
Entrevista a Justin Paulson (creador del sitio web del EZLN)

Por: Carlos de la Guardia
 

Es un impulso natural de las personas asignarle a las cosas que estiman mayores virtudes de las que en realidad tienen. Por ejemplo, Juán puede decirnos que su novia es el ser más perfecto sobre la tierra, pero al momento de conocerla generalmente pensaremos que exageró un poquitín. Manuel Lapuente puede hablar maravillas de la selección mexicana, pero cuando los vemos jugar ya no es lo mismo. Del mismo modo, quienes se especializan en las tecnologías de Internet, ya sea para trabajo, investigación, estudio o diversión, tienden a hablar del medio con un optimismo fuera de serie.

Para muchos de ellos Internet es el paladín de la democracia, el medio que permitirá que por fin todos los sectores de la sociedad se expresen y den a conocer sus puntos de vista. Gracias a su potencial de comunicación global barata y eficiente y a la facilidad con que permite que cualquier persona conectada a la red pueda obtener y publicar información, Internet funcionará como una fuente de liberación e igualdad para los oprimidos, especialmente en el tercer mundo.

Como siempre, basta poner los pies en la tierra para darse cuenta que no es así. En un mundo lleno de regiones donde aún no existen los teléfonos o la luz eléctrica, donde pocas personas siquiera saben leer o escribir, donde la lucha por el alimento diario no permite pensar en el poder del conocimiento, un medio que permite la circulación global de información puede ser muy interesante, pero de ninguna manera cambiará al mundo.

Estos argumentos generalmente son dichos por el mismo tipo de gente que insulta a la selección o que dice despectivamente a Juan que al fin y al cabo su novia está muy fea. Tal vez tengan algo de razón, pero ¿es este tipo de argumentos --ciento por ciento negativos-- de mayor ayuda?

En una segunda mitad de siglo donde hemos ido aprendiendo poco a poco que la tecnología y el progreso finalmente no resolverán por sí mismos los problemas de la humanidad, no resulta extraña una cierta animosidad hacia cada nuevo desarrollo tecnológico y hacia quienes lo abrazan con optimismo. Sin embargo, ¿no sería mejor ver a esta tecnología simplemente como una herramienta y tratar de ver si entre todos sus posibles usos existe alguno que pueda beneficiar al mundo?

En el caso de Internet, cientos de grupos a nivel nacional y mundial han tratado de aprovechar el medio para beneficiar diversas causas, desde el arte hasta la guerra. La pregunta que surge es, ¿han tenido algún tipo de éxito? ¿Es Internet, como tanto se ha dicho, un medio que verdaderamente puede ayudar a ejercer cierta presión social para lograr cambios positivos?

Nada mejor que un ejemplo cercano para examinar esta cuestión. En México, hemos tenido desde hace varios años un conflicto armado muy importante: Chiapas. Curiosamente, el inicio de la lucha armada en este estado, coincidió hasta cierto punto con el de la explosión de la World Wide Web en nuestro país y en el mundo, de manera que una de las páginas de web que primero llamó la atención a la prensa en México fue una dedicada al EZLN.

Esta página (http://www.ezln.org), creada en 1994 por Justin Paulson, hoy catedrático de la universidad de California en Santa Cruz, tenía el propósito de difundir información sobre el levantamiento en Chiapas. Su público objetivo en un inicio eran personas residentes fuera de México que buscaran información fidedigna sobre el conflicto, por lo que inicialmente casi todo lo publicado estaba en el idioma inglés, pero cada vez más y más mexicanos comenzaron a utilizar la página, de manera que en 1995 fue necesario publicar la mayoría de las noticias en español.

La página fue adquiriendo popularidad, en parte por contener la más vasta colección de notas, comunicados y artículos relacionados con Chiapas que podía conseguirse en Internet (y en otros medios), en parte por tratar sobre un conflicto activo y en parte por su apoyo al ejercito Zapatista. Periódicos como La Jornada y Reforma publicaron en ese tiempo artículos sobre la página que le dieron cierta notoriedad. Muchos profesores universitarios en México comenzaron a utilizarla como un ejemplo del potencial del medio o como una forma de llamar la atención sobre el conflicto. La visibilidad de la página en México fue tal que José Ángel Gurría llegó a declarar que la guerra de Chiapas no era más que "una guerra de tinta y de Internet".

Recientemente la dirección en el web de la página cambió, luego de que Justin registró el dominio ezln.org para su uso. Este registro, realizado con la autorización del EZLN, da a la página todavía más importancia como fuente de información sobre el conflicto desde el punto de vista de los mismos zapatistas. Pero dejemos que sea el mismo Justin Paulson quien describa un poco la historia, desarrollo y efectos de la página del EZLN. Carlos de la Guardia platicó con él mediante correo electrónico recientemente, para obtener los siguientes comentarios:

Carlos de la Guardia: Un breve comentario sobre por qué comenzaste la página.

Justin Paulson: Comencé muy temprano en 1994 después de tener dificultades para encontrar información confiable sobre el levantamiento zapatista. Decidí poner a disposición del público del web cualquier información que encontrara, a manera de archivo, y de forma que se presentara al zapatismo como lo que es, sin torcer su naturaleza o apropiarla para los fines de alguna organización. A fines de 1994 el número de visitas a la página comenzó a crecer velozmente. El propósito de la página es promover el zapatismo y proporcionar información confiable sobre Chiapas y el EZLN, sobre todo a través del extenso archivo de comunicados y documentos redactados con las propias palabras del EZLN. Las noticias solo se publican si están verificadas o provienen de una fuente confiable.

Carlos de la Guardia: ¿Cuáles fueron las reacciones que fuiste notando del público en general y en especial de los mexicanos?

Justin Paulson: Las reacciones han sido predominantemente positivas. En los tres primeros años de la página recibi menos de 10 respuestas negativas y cientos de mensajes de apoyo, muchos de ellos de mexicanos. Hoy, el número de reacciones negativas ha crecido a uno o dos mensajes al mes, quizá debido a la campaña del gobierno alegando manipulación extranjera de los zapatistas. Estos críticos no parecen comprender mi papel en este asunto, que es solamente publicar la información disponible.

Carlos de la Guardia: ¿Has recibido algún comentario directo o indirecto del gobierno mexicano?

Justin Paulson: La única respuesta indirecta fue la referencia de José Ángel Gurría sobre la "guerra de tinta y de Internet", que hubiera resultado humoroso de no estar tan lejos de la realidad. En Chiapas han muerto cientos, miles han quedado sin hogar o están mal alimentados. La represión aumenta. Se trata de gente verdadera, condiciones materiales verdaderas, ejércitos y balas verdaderas. Ojalá fuera solo una guerra "virtual".

Carlos de la Guardia: ¿Cómo consigues la información de la página?

Justin Paulson: Obtengo información de diversas fuentes: organizaciones como el FZLN, Enlace Civil, LIMEDDH o la CDH Fray Bartolomé de las Casas; periódicos y revistas como La Jornada y Proceso; y también de individuos. La mayoría la recibo por email, alguna por teléfono o fax.

Carlos de la Guardia: ¿Cómo obtuviste autorización del EZLN para usar la dirección ezln.org?

Justin Paulson: La autorización fue mediada por Javier Elorriaga, quien comunicó mi propuesta al Sub. Yo pagué la cuota de registro, pero el dominio está oficialmente registrado a nombre del EZLN, de manera que ellos tienen los derechos para su uso. El uso del nombre no es para acreditar mi página como órgano oficial del EZLN, sino para subrayar que es la más reconocida y utilizada presencia zapatista en Internet y que no está ligada a ninguna organización. Ha habido alguna confusión en la prensa sobre si mi página es o no la "oficial" del EZLN, a pesar de los avisos contenidos en la misma que indican claramente lo contrario.

Carlos de la Guardia: ¿Conoces la opinión de algún miembro del EZLN sobre tu página? ¿Te has comunicado directamente con uno de ellos?

Justin Paulson: No me he comunicado directamente con ningún miembro del alto comando. Hasta donde sé, solamente por comentarios obtenidos de segunda mano, los miembros del EZLN que han visto la página o impresiones de la misma están contentos con ella.

Carlos de la Guardia: ¿Qué opinas de la influencia que puede tener Internet en la divulgación de información política y social en el mundo? En particular en el tercer mundo, ¿crees que este medio pueda ser un elemento efectivo de presión social?

Justin Paulson: Tengo opiniones encontradas al respecto. Claro que creo que Internet puede ser una herramienta útil, pero tiene sus límites. Recuerden que aún hoy en día, la mayoría de las personas con acceso a Internet son blancas, de clase media y viven en una franja angosta situada en el hemisferio norte del globo... si a eso agregamos que una gran parte del mundo aún no cuenta con electricidad, es difícil ver cómo Internet puede ser una fuente de liberación, como los medios proclaman con demasiada frecuencia, por lo menos en los Estados Unidos.

Creo que la manera en que ustedes lo han dicho &emdash;como un instrumento de presión social&endash;es correcta; tal vez Internet actúe aún en un nivel más primario, como un mecanismo de distribución de información, de la verdad, que se convierte en un pre-requisito para la presión social y la acción efectiva. Internet ciertamente tiene potencial en este sentido; la RAND Corporation en Estados Unidos cree que el uso de Internet tiene algo que ver con forzar el alto a la ofensiva del ejército en febrero de 1995 (ver recuadro). La liberación de prisioneros políticos, incluyendo a Javier Elorriaga, puede haber sido afectada por los miles de firmas recolectadas electrónicamente en todo el mundo en peticiones que después fueron publicadas en la Ciudad de México.

Sin embargo, proclamar el éxito sería por supuesto prematuro. Las docenas de páginas web pro-zapatistas y los miles de suscriptores a las listas de correo pro-zapatistas no pudieron prevenir Acteal, no pudieron salvar la comunidad autónoma Ricardo Flores Magón. El gobierno mexicano no ha aceptado cumplir con lo firmado en San Andrés. Así que Internet ciertamente no es un medio todopoderoso y el grado en el que contribuye a la presión social es variable, dependiente de muchos factores externos.

Pero si ayuda aunque sea un poquito, vale la pena.