Por Guido Lara y Soledad
Rojas
Número 29
Bajo el triunfo de Vicente
Fox, candidato de la Alianza por el Cambio en la elección
Presidencial del 2 de Julio, subyacen una gran cantidad de pequeños
cambios ocurridos en la sociedad mexicana. Una de estas pequeñas
historias de cambio está en el terreno de la investigación
cualitativa. Pocos lo saben, pero la información cualitativa
de la campaña ganadora no se generó con base en Focus
Group sino con Grupos de Discusión.
I. Por qué empleamos Grupos
de Discusión en la Campaña Electoral
1.1. Lenguaje y política
Jesús Ibañez desarrolló la metodología
del Grupo de Discusión desde una perspectiva estructural
en la que el investigador opera como un sujeto en proceso -inmerso
en su objeto de estudio- (Ibáñez, 1985). El funcionamiento
del mundo social depende del lenguaje pues "la sociedad es
una realidad que habla". Para el Grupo de Discusión
el lenguaje es lo social y es tanto objeto como instrumento de estudio.
Para Ibáñez el orden
social está tejido de dictados e interdicciones. Los dichos
dominantes nos señalan qué hacer y decir y, al mismo
tiempo, qué no hacer y qué no decir. Lenguaje y poder
están ligados indisolublemente1.
1.2. La vida social es conversación
La unidad mínima de interacción social es la conversación,
un juego de lenguaje dialógico. Si cualquier forma de vida
social tiene la forma de una conversación, en un contexto
democrático, el conjunto del proceso político tiene
también esta estructura dialógica. Una campaña
electoral es un monumental ejercicio de diálogo entre un
candidato, las fuerzas políticas que lo apoyan y el conjunto
de la sociedad.
1.3. La opinión del público
tiene la forma de una conversación
La opinión del público tiene la forma de una 'conversación'.
Es en el habla de la gente -puesta en acción a través
del diálogo- que se gestan las percepciones sociales. Durante
las pláticas informales entre los miembros de un grupo social
se produce y circula la llamada "opinión del público"2.
Los tópicos ("los lugares comunes") de estas conversaciones,
se reproducirán en las sesiones de grupo generando material
rico para el análisis y la interpretación.
Lo que busca crear el Grupo de Discusión
es un juego de información abierto, pues el que responde
puede cuestionar la pregunta y hacer otras preguntas: "jugadas
del lenguaje" en el sentido de Lyotard3.
Sólo con métodos cualitativos
podremos comprender las percepciones políticas que preceden
y explican las preferencias electorales, aunque nunca podremos prescindir
de los métodos cuantitativos porque estos nos permiten conocer
el peso real que tienen las diversas opiniones en un escenario electoral
y de respaldo político4.
Es fundamental articular la comprensión (factor cualitativo)
con la medición (factor cuantitativo) de la opinión
del público.
1.4. La opinión del público
tiene forma de grupo.
Durante una discusión grupal asistimos al proceso mismo de
generación de lo ideológico. El microgrupo funciona
como reflejo de la sociedad, tiene la potencia para expresar al
macrogrupo.
El Grupo de Discusión es
una técnica muy potente para la investigación social:
se caracteriza por tener un enfoque no directivo, lo que libera
el uso de la palabra. Los participantes encuentran en la sesión
un espacio abierto para la conversación, en el que se expresa
más el habla colectiva que la voz individual.
Es el discurso grupal, y no las
voces individuales, lo que interesa para el análisis. A diferencia
de la encuesta estadística que recorta a los individuos de
sus relaciones con los demás, el Grupo de Discusión
trabaja a nivel de las relaciones de lenguaje (conversacionales)
y relaciones existenciales (pulsionales) de los participantes, con
lo que no desnaturalizamos la interacción social para estudiar
a la sociedad. El grupo es el sujeto de estudio y en él podemos
identificar y comprender la subjetividad colectiva.
II. Por qué hicimos más
Grupos de Discusión que Focus Groups
Al utilizar Grupos de
Discusión como herramienta básica para producir información
cualitativa para la campaña se dio prioridad a una perspectiva
estratégica (los focus groups trabajan en una perspectiva
táctica) para diseñar la comunicación política,
pues nos colocamos en un nivel superior de análisis desde
el cual buscamos comprender el proceso social dentro del cual estábamos
insertos.
La realización de focus group
estuvo limitada por el hecho de haber preferido los hallazgos estratégicos
a los tácticos, así como por el ritmo vertiginoso
de la campaña que en la mayoría de las ocasiones exigió
que los spots de TV y Radio estuvieran al aire sin tiempo para ser
probados en focus groups.
Hay que señalar que los principios
metodológicos del Grupo de Discusión también
permiten perseguir objetivos focalizados (ya que la dinámica
va de lo general a lo particular), mientras que es muy difícil
lograr hallazgos de investigación estructurales al emplear
focus groups (ya que la dinámica inicia en un nivel particular
y se focaliza en los detalles).
2.1. El focus group es una técnica
limitada al test de mensajes
Para esbozar los límites y alcances del Focus group resulta
muy interesante localizar su punto de partida metodológico.
En 1956 Robert K. Merton, Marjorie Fisk y Patricia Kendall publicaban
The Focussed Interview (1956) obra que como lo señala la
portada de la segunda edición (1990) es considerada en USA
"as the classic work that introduced basic qualitative techniques
to mass communications and public opinion research". Es divertido
leer lo escrito por Merton en esta segunda edición:
"There can´t be many
people in the field of social science and certainly none in the
related field of marketing research who know less about focus
groups than I (
) It had been only a little while ago that
Patricia Kendall and I had learned of the widespread use of focus
groups in marketing research. Perhaps we had not been reading
the "right" books and journals. At any rate, when this
development was called to our attention and when the techniques
employed in focus group research were said to derive from our
work some forty years ago on the focussed interview, my own curiosity
about that development began to mount" (Merton, 1990: XIII-XIV).
Estas palabras de Merton coinciden
con nuestra sensación de que el auge del focus group en el
mundo de la mercadotecnia y la publicidad no cuenta con un referente
teórico sólido en el de las ciencias sociales.
La expansión del focus group
ha estado basada en los vertiginosos ritmos del marketing, impulsada
por clientes ansiosos de resultados inmediatos y de profesionales
más enfocados a servir dicha urgencia que a fundamentar con
solidez sus procesos de investigación (todo esto con la coartada
del carácter cualitativo/subjetivo de la técnica).
2.2. Principales Diferencias entre el Grupo de Discusión
y el Focus Group
A simple vista un Grupo de
Discusión y un Focus Group son muy parecidos, sin embargo,
su génesis, su evolución y los objetivos que persiguen
están enmarcados en paradigmas diferentes entre sí.
Para ilustrarlo haremos una esquema comparativo del trabajo metodológico
de Jesús Ibáñez y Robert K. Merton, punto de
partida del Grupo de Discusión y el focus group respectivamente.
Comparación entre el Focus
Group y el Grupo de Discusión
|
FOCUS
GROUP
|
GRUPO
DE DISCUSIÓN
|
Paradigma teórico |
Positivismo |
Dialéctica-estructural |
Finalidad de las
ciencias sociales |
Control |
Liberación |
Concepción
de la ciencia |
Ciencia experimental |
Ciencia reflexiva |
Objeto de estudio |
Test de productos
comunicativos |
Comprensión
de procesos sociales |
Concepción
del Lenguaje |
Las palabras sólo
son significados |
Las palabras implican
sentidos más allá de sus significados |
Juego de Lenguaje |
Estímulo-Respuesta |
Conversación |
Aproximación |
Focus |
Opening |
Unidad de producción
de información |
Individuo |
Grupo |
Tipo de información |
Información
específica y detallada |
Información
general y estructural |
Moderación
|
Directiva |
No directiva |
Desarrollo |
Merton no desarrolló
la metodología del Focus Group |
Ibáñez
si desarrolló la metodología del Grupo de Discusión |
La reflexión epistemológica,
metodológica y técnica el Grupo de Discusión
fue desarrollada por Jesús Ibañez de la A a la Z,
mientras que, por el otro, a partir de las ideas de Merton los profesionales
del marketing y la publicidad han generado múltiples versiones
de su aplicación práctica (esencialmente como técnica
de investigación para evaluar la respuesta a estímulos
comunicacionales).
Los principios fundamentales del
Grupo de Discusión son:
- El sujeto investigador es un sujeto
en proceso inmerso en el objeto de estudio
- El lenguaje es objeto e instrumento de investigación
- La conversación es el juego de lenguaje propio de lo social
- La 5apertura y la no-directividad6
son los dispositivos de producción del discurso
- El microgrupo expresa la estructura del macrogrupo
- El discurso grupal es la materia prima para el análisis
y la interpretación
- El lenguaje se analiza en su función estructural (no sólo
en la referencial)
- El lenguaje se interpreta en orden de sus sentidos.
Desde esta perspectiva hemos sido
muy críticos con la práctica del focus-group llevada
a cabo por muchas agencias de investigación, porque va a
contracorriente de los principios de grupalidad y conversacionalidad
que, creemos, deben caracterizar a la investigación cualitativa
mediante grupos.
Entre los principales factores que
van en contra de la forma-grupo podemos señalar:
- Mesas cuadradas o rectangulares
y no redondas (forma grupo por excelencia)
- Reuniones con doce participantes cuando a partir de diez la dinámica
grupal favorece la fragmentación en subgrupos
- Ubicación preponderante del moderador que atenta contra
la simetría y la figura propia de un grupo.
- Moderador que hace preguntas específicas a individuos y
no al grupo
- Reportes que hablan de "la mayoría dijo", "la
minoría opinó", rompiendo la idea de grupo como
unidad funcional y privilegiando la de suma de individuos.
Entre los principales factores que
van en contra de la forma-conversación podemos señalar:
- Actitud directiva del moderador
- Predominio de la guías de "entrevista" extensas
y detalladas que interrumpen la discusión, inhiben la conversación
y favorecen la forma estímulo respuesta - respuesta.
- El mismo nombre Focus Group Interview destaca la bidireccionalidad
en lugar de la multidireccionalidad
- La focalización excesiva que deriva en inducción7.
2.3. Empleo de técnicas focales
durante la campaña
Nuestra práctica nos ha permitido observar que con los fundamentos
del Grupo de Discusión, incluso de la focussed interview
(para entrevistas y no para grupos) es perfectamente posible e inclusive
recomendable perseguir objetivos de investigación focalizados.
La defensa del Grupo de Discusión
realizada en este artículo, en la práctica no implicó
ningún dogmatismo de nuestra parte durante la campaña
electoral, pues realizamos algunos focus groups para probar spots
de televisión con buenos resultados ya que se logró
un fine tunning de los mensajes. Debemos decir también
que en otras ocasiones, cuando nos solicitaron la prueba de materiales
de comunicación, propusimos la realización de focussed
interviews para alcanzar los objetivos de investigación.
Por ejemplo cuando a 24 horas del
cierre del registro de la coalición del Partido Acción
Nacional y el Partido Verde Ecologista de México que presentarían
la candidatura de Vicente Fox se nos encomendó testear 5
nombres potenciales para denominar a la coalición. ¿Qué
hacer? Una encuesta era muy arriesgada; sin duda, obtendríamos
un nombre preferido por mayoría pero no comprenderíamos
el por qué de su elección. Realizamos 60 focussed
interviewes a ciudadanos del DF dividiéndolas en 5 distintos
perfiles construidos con base en la escolaridad y la zona rural
o urbana en la que habitaban. El resultado fue claro -desde luego
no representativo en términos estadísticos- pero si
en cuanto a los sentidos que evocaba: el nombre propuesto
fue Alianza por el Cambio.
En suma, si el objetivo de investigación
es específico, es pertinente acudir a técnicas focales
como la focussed interview o los focus group. Pero consideramos
que la multiplicación de este último como la técnica
rey de la investigación cualitativa ha tenido efectos negativos
para aprovechar plenamente el potencial de la investigación
mediante grupos.
III. La aplicación concreta:
la campaña presidencial de Vicente Fox
3.1. El valor de analizar
el lenguaje en una contienda política
Hasta ahora hemos señalado el potencial del Grupo de Discusión
como herramienta de gran utilidad en un proceso de comunicación
política y hemos advertido de los límites y alcances
del focus group.
Las técnicas cualitativas
tienen la ventaja de producir lenguaje como información base,
lo cual es muy valioso porque las oraciones, las frases, las palabras
son la materia prima de cualquier estrategia de comunicación.
Al respecto, Balandier señala: "apropiarse de las palabras
en que se encuentra depositado todo aquello que un grupo reconoce
es asegurarse una ventaja considerable en las luchas por el poder"
(1994: 291).
Comprendiendo la forma en como esta
estructurada la opinión del público, el emisor podrá
diseñar mensajes que dialoguen con el receptor hablándole
de los temas que le interesan, en los términos que él
comprende; es decir, de acuerdo a sus intereses y con sus palabras.
Por lo tanto, debemos tener mucho cuidado, pues mucho perderá
nuestra vida democrática si los actores políticos
utilizan la información sólo para hacer un ajuste
cínico del mensaje y sus propuestas políticas. Por
el contrario, mucho avanzaremos si la información sirve para
emprender un proceso de diálogo y convencimiento responsable
de la ciudadanía a partir de sus propias opiniones, puntos
de vista y circunstancias.
3.2. Demanda de Accionabilidad
La principal exigencia de Francisco Ortíz coordinador de
mercadotecnia de la campaña presidencial con relación
a nuestro trabajo se sintetiza en una palabra: Accionabilidad. La
demanda del cliente era producir, analizar, interpretar, traducir
y sintetizar información accionable en actividades de comunicación
política efectiva
El reto fue grande porque la técnica
del Grupo de Discusión está diseñada para producir
mucha información relevante. Los hallazgos eran múltiples,
sin embargo, Francisco Ortíz y el propio Vicente Fox fueron
muy exigentes al solicitar reportes ejecutivos con información
accionable en una comunicación cercana a los intereses y
expectativas de los ciudadanos.
A continuación relataremos
cómo algunos de los hallazgos de investigación cualitativa
fueron traducidos en acciones estratégicas de comunicación
política de gran impacto.
3.3. La madre de todas las batallas:
El deseo de cambio vs la inercia y la impotencia
Desde el inicio formal de la campaña en enero del 2000, gracias
al análisis estructural del discurso producido en los grupos
de discusión, identificamos las fuerzas estructurales que
se enfrentaban,. Por un lado, el gran deseo de cambio de la mayoría
de los mexicanos; por el otro, la inercia, el escepticismo y un
sentimiento generalizado de impotencia ante la supuesta invencibilidad
del PRI.
Goran Therborn (1987) ha trazado las coordenadas del sometimiento
ideológico al mostrarnos como el orden discursivo dominante
somete y cualifica a los sujetos diciéndoles, haciéndoles
reconocer y relacionándolos con: Lo que existe, lo que es
bueno y lo que es posible.
- Lo que existe y lo que
no existe. Nos habla sobre la visibilidad del mundo, el cual
queda estructurado mediante claros, sombras y claroscuros.
- Lo que es bueno y lo que es malo. Nos habla sobre
lo correcto y lo incorrecto, lo justo y lo injusto, lo bello y lo
feo, lo deseable y lo indeseable, etc.
- Lo que es posible e imposible. Nos habla sobre nuestro
sentido de mutabilidad en el mundo, las consecuencias del cambio
y la inmovilidad.
Al inicio de la campaña las
dos primera líneas de defensa del dominio priista estaban
muy débiles, pues era generalizada la conciencia de que existía
un regímen autoritario/corrupto y que éste era malo
para el país. Sin embargo, la última barrera se erigía
como una verdadera muralla, porque aunque se admitía la existencia
injusta y perjudicial del régimen priísta, demasiados
mexicanos compartían la percepción de que era una
realidad que no se podía cambiar.
Por lo tanto, la estrategia de comunicación
de la campaña debía servir para comunicar a la sociedad
la existencia de nuestro candidato, las bondades de su propuesta
política, pero sobre todo, la posibilidad real de vencer
al PRI en la elección presidencial.
3.4. La primera batalla ganada:
apoderarse de la bandera del cambio
Si en 1994 el voto del miedo favoreció al PRI, para el año
2000 el temor al cambio era casi nulo: el único temor real
era que no hubiera cambio Todas las encuestas señalaban que
al menos 80% de los electores consideraban necesario un cambio en
el país. La paradoja inicial fue que un porcentaje significativo
señalaba su intención de voto a favor de Francisco
Labastida, candidato del PRI, y le atribuían la posibilidad
de representar un cambio.
La investigación (tanto la
cualitativa como la cualitativa) no dejaba lugar a duda las elecciones
las ganaría el candidato que representará con mayor
veracidad la bandera del cambio. Por lo tanto, era estratégico
apoderarse de dicho posicionamiento. Empezamos bien con la denominación
de Alianza por el Cambio y durante toda la campaña el concepto
cambio fue el que dio unidad a las acciones. Con esta información
el equipo creativo de la campaña generó dos lemas
con la palabra cambio que estuvieron presentes en un sin fin de
aplicaciones creativas: El cambio que a ti te conviene y cada vez
somos más los que queremos el cambio.
Además la personalidad y
el estilo de Vicente Fox, su vestimenta (sin corbata, siempre con
botas y con una gran hebilla con las letras FOX), su lenguaje, franco,
directo y repleto de frases coloquiales; su trato cercano y antisolemne,
sus propuestas novedosas, su beligerancia con el gobierno, etc.
Lo hicieron ser percibido como un muy creíble abanderado
del cambio. La investigación, en este caso, sólo sirvió
para confirmar el acierto generado por la gran astucia e intuición
del candidato.
Mientras tanto, la demanda del cambio
llegaba hasta el PRI, partido que durante la campaña se hizo
llamar el Nuevo PRI (con relativo éxito inicial gracias
al efecto de la primeras elecciones primarias presidenciales en
su historia , pero que rodó por los suelos en la recta final
de la contienda cuando el equipo de campaña fue apuntalado
por destacados políticos de la vieja guardia, coloquialmente
conocidos como dinosaurios) Por su parte, Labastida utilizó
como concepto rector de su campaña un lema abstracto y poco
creíble: "Que el poder sirva a la gente". De esta
manera aunque el candidato del PRI en sus discursos y entrevistas
buscaba posicionarse como el representante del "cambio con
rumbo", este concepto nunca llegó de manera consistente
al gran público, por ejemplo nunca estuvo incluido en spots
en TV dirigidos a públicos masivos.
3.5. Del candidato "oficial"
al candidato "de más de lo mismo"
Durante la contienda interna del PRI por la candidatura presidencial
todo el mundo sabía que Francisco Labastida era el candidato
del Presidente. Su principal rival Roberto Madrazo llevó
a cabo una agresiva y retadora campaña "contra el candidato
oficial" y con ello fue un verosímil representante del
cambio al interior de su partido. Sin embargo, la historia es de
todos conocida y la maquinaria priísta arrolló en
las elección interna al candidato disidente.
Ya con los candidatos presidenciales
de todos los partidos y coaliciones registrados, Vicente Fox también
comenzó a referirse a Francisco Labastida como "el candidato
oficial". Durante el proceso de investigación identificamos
el grave riesgo de llamarlo así pues fortalecía la
percepción de un candidato respaldado por el régimen,
además de que el calificativo oficial en sí no era
negativo y más bien parecía un sello de garantía
o un aval.
Ante tal hallazgo la propuesta fue
clara: dejar de llamar a Labastida el candidato oficial y buscar
una adjetivación consistente con nuestra estrategia de abanderar
el cambio. La propuesta tuvo eco y desde ese momento Labastida dejo
de ser el candidato oficial para pasar a ser "el candidato
de más de lo mismo".
3.6. Reducir el tamaño del
rival: Vencer al PRI no al " Sistema"
Era indispensable generalizar la percepción de que Vicente
Fox podía ganarle a Francisco Labastida en la elección
presidencial por lo que identificamos la necesidad de reducir y
acotar el tamaño del rival para hacer creible su derrota.
Por lo tanto, se recomendó evitar cualquier alusión
al "Sistema" y dirigir los ataques y las críticas
al PRI. Atacar o criticar "al sistema" era muy dañino
porque reforzaba la impresión de que el rival era enorme
y ubicuo (como en realidad lo era dados los múltiples apoyos
de los factores reales de poder: grandes empresarios, medios de
comunicación, sindicalismo oficial, etc.) Con base en esta
idea se generaron varias líneas de comunicación, pero
quizá la más importante fue un spot de televisión
cuyo selling line decía "Adios al PRI". Con la
música de fondo de "Las golondrinas", canción
de mariachi utilizada en todas las despedidas el spot ponía
el acento en las grandes fallas históricas de dicho partido.
Por su parte, Vicente Fox, guiado más por su sexto sentido
que por alguna recomendación proveniente del estudio de la
opinión del público comenzó a menospreciar
e incluso humillar a Francisco Labastida, entre otros adjetivos
lo llamaba "chaparrito" reiteradamente.
3.7. ¿Qué atributos
desea la gente en la figura presidencial?
Al propio Vicente Fox le causaba cierta ansiedad el que pudiera
ser percibido como una figura positiva pero "no presidencial".
Debido a que su imagen y su propuesta contrataba radicalmente con
lo que los mexicanos estaban acostumbrados a ver en los Presidentes
priistas que habían gobernado el país en las últimas
décadas.
Recibimos el encargo de identificar
los atributos esenciales que los mexicanos querían de su
nuevo Presidente. En casos como este es cuando se hacen más
evidentes las ventajas del Grupo de Discusión sobre el focus-group
ya que logramos explorar los atributos a los que la ciudadanía
realmente les daba valor, en lugar de probar atributos predeterminados
y obtener un resultado.
Encontramos 4 atributos fundamentales:
a) Ser honesto (hablar con la verdad / no robar)
b) Ser trabajador
c) Ser cercano y sensible a las necesidades de la gente común
d) Comportarse a la altura de un Presidente
La investigación también
nos permitió encontrar que los primeros 3 atributos empataban
íntimamente con la imagen de Vicente Fox. El único
atributo en el que había que trabajar era el cuarto pues
no se aprobaba que Fox utilizara dentro de su lenguaje coloquial
"malas palabras" o groserías y que maltratara a
sus contendientes o les faltara al respeto (actitudes que se consideraban
no - presidenciales). Tras una interesante reunión de trabajo
en la que discutimos con el candidato estos puntos, el uso de malas
palabras disminuyó significativamente hacia la recta final
de la campaña.
Afortunadamente la gente le daba
poco valor a los estilos solemnes y formales de los cuales se distanciaba
Fox de forma tan evidente. Su vestimenta y su lenguaje (siempre
y cuando evitara las groserías) por el contrario eran una
gran ventaja y sólo se esperaba de él que acudiera
a las formas tradicionales y protocolarias cuando representara a
México ante el extranjero.
3.8. Sectores populares: disminuir
la ventaja
La investigación confirmó problemas estructurales
para alcanzar a un electorado que finalmente favoreció al
candidato del PRI, la clave no era ganar en estos segmentos sino
perder por poco, nunca antes un candidato del PAN había obtenido
tantos votos entre los sectores populares.
Las mujeres de estas clases ponían
en primer lugar sus necesidades inmediatas (alimentación,
salud, educación, vivienda). Buscaban una relación
paternalista y asistencial con el Estado, como un proveedor de todas
aquellas necesidades que no podían cubrir sus parejas o familias.
Por su parte, los hombres tenían la expectativa de que el
Estado les diera apoyo para tener mayor poder adquisitivo y cumplir
su función como proveedores del hogar. En ambos casos, se
expresada la vigencia del del vínculo paternalista que históricamente
los había atado a los designios del PRI.
Se presentaba una disyuntiva: comportarse
como el PRI y continuar en el mundo de las promesas y las dádivas
o tomar un camino diferente. La mejor opción fue garantizar
que se mantendrían los principales programas de la política
social destinados a los sectores marginados (Progresa, Procampo)
y no abundar más en las típicas promesas desmedidas
que tenían harto al pueblo por su incumplimiento reiterado.
Por su parte Labastida, prefirió continuar en el marco de
las grandes promesas (ej: inglés y computación para
todas las escuelas) que tanto escepticismo generaban en el electorado.
3.9. La campaña negativa:
Convertir la elección en un plebiscito Fox si o Fox no
Desde muy temprano en la campaña identificamos que Labastida
no podría levantar, el escepticismo y los agravios acumulados
lo impedían estructuralmente. Sin embargo, también
identificamos que la imagen de Fox aunque estaba en ascenso continuo
podía caer con base en su polémica personalidad. Parece
ser que así lo entendieron también en el PRI y en
la recta final de la campaña guardaron en el cajón
las propuestas y empezaron una intensa campaña negativa.
El PRI, con la ayuda franca de la
mayoría de los principales medios de comunicación
electrónicos e impresos del país, propago la imagen
de un monstruo llamado Vicente Fox: Vende patrias, contradictorio,
mentiroso, con serios problemas de carácter, intolerante,
más mil y un defectos más. Gracias a la investigación
logramos detectar los efectos de esta campaña pero también
sus limitaciones y sus estrategias de defensa. La recomendación
global fue evitar el marco de un plebiscito sobre la persona y personalidad
de Fox sino un plebiscito a favor o en contra de el cambio. En lo
particular se recomendó la defensa de los ataques que realmente
hacían daño. El mejor ejemplo fue la acusación
de que Fox vendería Pemex, compañía petrolera
icono de nuestra soberanía nacional a intereses extranjeros.
Nuestro candidato reiteró hasta la saciedad la falsedad de
esta acusación con lo que atenuó el efecto de uno
de los dardos más venenosos lanzados por el rival.
3.10. Subrayar el valor del voto
y dejar de hablar de fraude electoral
Al analizar múltiples procesos electorales a escala estatal
y municipal observamos que en términos generales el PRI era
más derrotable en aquellos con mayor participación
electoral. Esto se explica porque el voto duro (la clientela) del
PRI es limitado en números absolutos, por lo que una baja
participación aumentaba sus posibilidades de triunfo.
De esta manera la campaña
negativa no sólo afectaba directamente a Fox sino indirectamente
al proceso en su conjunto al generar hartazgo y escepticismo; todo
se sumaba al fantasma del fraude electoral ya que demasiadas personas
creían con firmeza que el PRI haría trampa y se impondría,
percepciones detonadoras de abstencionismo. El mismo Fox insistió
durante demasiado tiempo sobre el fraude lo cual tenía un
efecto boomerang, la investigación confirmó este peligro
y en los últimos meses el candidato matizó su postura
inicial.
Afortunadamente no todos los mitos
populares estaban en nuestra contra. Identificamos una percepción
muy generalizada que decía "no votar, es votar por el
PRI" , la cual reforzamos porque jugaba a favor de nuestro
propósito de una mayor votación. Ante este panorama,
en la fase de invitación al voto recomendamos subrayar que
la disputa sería muy peleada y que un solo voto puede ser
la diferencia: "tu voto cuenta y se va a contar".
3.11. El empate técnico
Durante toda la campaña la alianza por el Cambio y el PRI
promovieron amplia difusión en medios de las tendencias electorales,
a lo que se le llamó la guerra de las encuestas. Cabe señalar
que en ningún momento por nuestra parte se falseo información
y siempre se reportaron los resultados obtenidos los cuales coincidían
en señalar tanto un tendencia de ascendente favorable a nuestro
candidato en los primeros cuatro meses y un empate técnico
hacia la recta final de la contienda. Por cierto el posicionar el
concepto de empate técnico fue de gran valor para nuestro
objetivo de generalizar la percepción de que realmente la
elección estaba en juego.
3.12. Los indecisos
A unas semanas de la elección era claro que los votantes
indecisos serían los que inclinarían la balanza. Se
nos encargo estudiar a este segmento para identificar riesgos y
oportunidades. El resultado fue muy alentador los indecisos estaban
claramente a favor del cambio y consideraban que Fox era el candidato
que más se acercaba a lo que ellos querían, pues al
PRD, se le consideraba un cambio radical y riesgoso. El problema
lo representaban los efectos de la campaña negativa que desembocarían
en abstencionismo o votos hacia los partidos pequeños. Sin
embargo, ante dicha disyuntiva el valor principal era el cambio
(por encima de un escepticismo antes tan arraigado). Identificamos
la necesidad de hacer más atractivo el cambio: a) asociándolo
a transformaciones concretas y tangibles: empleos bien pagados,
mejor poder adquisitivo, becas, atención médica, obras
públicas, apoyo al campo. b) comprometiéndose a corregir
problemas que les afectan: corrupción, marginación,
inseguridad, etc. c) garantizando mantener lo bueno que ya se tiene
y mejorar en lo que es necesario. Estas líneas fueron remarcadas
por el candidato.
3.13. El valor de encontrar palabras
que hicieran un corte en el tiempo
Las palabras YA y HOY desempeñaron un papel significativo
en la campaña. La palabra YA se asociaba con el cambio, la
alternancia y la necesidad de poner un alto a las carencias (económicas,
inseguridad, educación, etc.). También generaba la
percepción de que el tiempo para el cambio había llegado.
En este mismo sentido se interpretó la palabra HOY, que surgió
en un momento desafortunado para el candidato en vivo en televisión
abierta. HOY hizo sentido con el YA y confirmó la urgencia
del cambio.
Comprender las implicaciones de
estos significados permitió combatir el gradualismo tan favorable
a la cuasi eternidad del PRI. Romper con la percepción de
que "los cambios no se pueden hacer de la noche a la mañana"
y comunicar que era posible un cambio de poder aquí y ahora.
El slogan utilizado para cerrar
la campaña: "¡Ya ganamos!" fue un gran acierto
del equipo creativo, que recuperó y capitalizó los
hallazgos de la investigación cualitativa. Su objetivo fue
remarcar que el triunfo de la sociedad mexicana sobre el PRI era
real y posible. Y afortunadamente lo fue.
Notas:
1
" El poder está entonces en los más finos mecanismos
de intercambio social (...) plural en el espacio social, el poder
es, simétricamente, perpetuo en el tiempo histórico:
expulsado, extenuado aquí, reaparece allá; jamás
perece: hecha una revolución para destruirlo, prontamente
va a revivir y rebrotar en el nuevo estado de las cosas. La razón
de esta resistencia y de esta ubicuidad es que el poder es el parásito
de un organismo transocial, ligado a la entera historia del hombre,
y no solamente a su historia política, histórica.
Aquel objeto en el que se inscribe el poder desde toda la eternidad
humana es el lenguaje". (Barthes,1987:117).
2 Queremos diferenciar entre la
opinión del público (Lara y Arizpe, 1998) del
fenómeno conocido como opinión pública que
como bien lo ha visto Balandier (1994) es producto de la pugna de
intereses de "agentes y dispositivos" que compiten por
ser quienes la fabriquen, maquinen, expresen, etc. "aunque
sea dando la impresión de que tan sólo la analizan
y la ponen en claro"(Balandier, 1994: 291). Si los actores
políticos se limitan a conocer ésta opinión
publica sin escuchar y comprender las opiniones de la gente es muy
probable que guiarán su acción al margen de los sentimientos,
necesidades, temores y expectativas de los ciudadanos.
3 "El lazo social está
hecho de 'jugadas de lenguaje' (...) Cada interlocutor sufre jugadas
de lenguaje que le atribuyen un desplazamiento, una alteración,
sean del tipo que sean, y eso no solamente en calidad de destinatario
y de referente, sino también como destinador. Esas jugadas
no pueden dejar de suscitar contra-jugadas
" (Lyotard,
1984: 38).
4 La votación tiene la
forma de un "test". Al igual que un cuestionario cerrado
la libertad del votante está acotada:
a) El elector está obligado a elegir entre un repertorio
cerrado de opciones. Por ejemplo: PAN, PRI, PRD.
b) El elector no elige ni conforma las opciones (las recibe ya dadas).
c) El elector sólo puede votar por una y sólo una
opción.
d) El cuestionario no tiene la capacidad para registrar cualquier
opinión que se genere al margen de las opciones señaladas.
La encuesta estadística tiene la misma forma que la votación;
por eso es la técnica más adecuada para investigar
tanto las tendencias de voto como los resultados de una elección
mediante conteos rápidos y encuestas de salida.
5 Resulta paradójico señalar
que el primer criterio señalado por Merton para una entrevista
productiva es el de Range. "The interview should enable interviewees
to maximize the reported range of evocative elements and patterns
in the stimulus situation as well as the range of responses".
(Merton, 1990:12).
6
El propio Merton señala la importancia de la no directividad
"The value of the non-directive approach to interviewing has
become increasingly recognized, notably since the work of Carl Rogers
and of Roethlisberger an Dickson. It gives the interviewee an opportunity
to express himself about matters of central significance to him
rather than those presumed to be important by the interviewer. That
is, in contrast with the polling approach, it uncovers what is on
the interviewee´s mind rather than his opinion of what is
in on the interviewer´s mind" . (Merton, 1990:13).
7
Merton también subraya las implicaciones de la focalización
"And as the literary philosopher Kenneth Burke once observed
(in a memorable fashion that I like to describe as the Burke theorem):
"A way of seeing is also a way of not seeing -a focus upon
an object A involves a neglect of object B." (That maxim, by
the way, is clearly one to be remembered in the use of focused interviews
and focus groups)" (Merton, 1990: XV)
Guido Lara
Investigador, Escritor y Consultor.
Socio Consultor de REDES Investigación,
México.
Soledad Rojas Rajs
Investigadora. Consultora Asociada,
REDES Investigación, México. |