Por Carlos Arcila
Número 35

Las nuevas tecnologías de la comunicación y la información, además de los acelerados cambios mundiales de nuestras sociedades, nos invitan a participar en un sinfín de posibilidades de hacer comunicación social en el nuevo milenio. Como periodistas, productores, publicistas, diseñadores y mediadores, debemos mantenernos a la vanguardia con los procesos de innovación de nuestros instrumentos de trabajo, los cuales modifican notablemente los productos que realizamos.

La propuesta de crear un medio de comunicación digital elaborado por estudiantes de comunicación social, con un estilo dinámico y juvenil, que aborde con el mayor profesionalismo los temas de la comunidad universitaria y su entorno, aboga por la salida a la opinión pública de los trabajos producidos por los estudiantes en sus rutinas académicas, como ha sido concebido en periódico El Comunicador, ente de la Universidad de Los Andes en Venezuela.

Periódicos como Puntocom, de la Universidad Pontificia de Perú; El Ucabista, de la Universidad Católica Andrés Bello de Venezuela; y Perspectiva, de la Pontificia Universidad de Santiago de Chile; son muestras de medios experimentales para el ensayo práctico de los estudiantes. Sin embargo, es la publicación de aquellos excelentes trabajos universitarios, que se pierden tras su almacenamiento en archivos personales o en dentro de cestas de basura, en que esta propuesta quiere dar énfasis.

Los creadores de esta iniciativa, materializada con el nombre de El Comunicador, en la Universidad de Los Andes - Táchira, Lobo y Rujano (2001) afirman que este modelo de periódico digital: "vincula a la Institución con la comunidad y más allá, canalizando el potencial creativo de los futuros profesionales, al tiempo de relacionarlos directamente con los mecanismos de vanguardia en el orden de las comunicaciones y de estimularlos publicando y dando a conocer al mundo sus trabajos realizados en el aula".

De esta manera, la creación de un periódico digital estudiantil en las escuelas de comunicación social, con un formato dinámico, práctico y económico, ofrece un conjunto de alternativas para facilitar los procesos de consulta, brinda respuestas concretas y confiables a los visitantes, acorta distancias y establece nexos con diferentes sectores de la sociedad.

Lobo y Rujano (2001) también indican que:

La innovación no se encuentra en el canal que utiliza, sino la tendencia a abrir por fin las vías de participación directa del público como individuo y no como masa, en la demanda de información y emisión del mensaje. La idea le ofrece a los estudiantes de comunicación social la posibilidad de tener una tribuna autónoma para exponer sus ideas y opiniones, en un formato técnicamente factible, económico en términos de dinero espacio y tiempo.

Los objetivos de esta propuesta son:

Objetivo General
Construir un periódico digital de participación estudiantil.

Objetivos Específicos
1. Seleccionar los datos de información periodística que se generen en el contexto universitario producidos por los estudiantes, clasificándolos de acuerdo a su género y contenido en secciones dentro de un cuerpo comunicacional.
2. Recopilar información académica, histórica e institucional sobre la escuela de comunicación social.
3. Integrar a los estudiantes en los procesos reales de creación, producción, mantenimiento y promoción de un medio de comunicación digital, colaborando con su vinculación a las nuevas tecnologías de la comunicación y la información.

Ahora bien, es posible ofrecer un enfoque teórico que resuma el proceso de participación en un periódico digital como el que se propone. Según Ripoll (1999):

La comunicación masiva, tal y como se realiza en nuestros días, es una forma de comunicación surgida en el seno de una sociedad cuya característica esencial es las grandes concentraciones urbanas y la posibilidad ofrecida por las tecnologías de producir mensajes con destino a cualquier de las personas con un espacio geográfico concreto.

Así, desde la estructura de un medio digital desarrollado con base a la participación estudiantil en las escuelas de comunicación social, el diseño de este modelo contempla tanto a los emisores como a los receptores en su constante interactividad e intercambio de roles.

Con respecto las etapas de creación de este proyecto se pueden mencionar las siguientes:

• Concepción del proyecto
  
• Exploración en Internet
  
• Investigación documental
  
• Recopilación de datos
  
• Esquema de trabajo
  
• Diseño de la plantilla de trabajo
  v Selección y disposición de los elementos
  v Mapa de navegación
  v Construcción de los sitios web
  v Talleres de formación
  v Alojamiento en el servidor
  v Diseño y ejecución de una campaña publicitaria

Ahora bien, lo primero a realizar en la planificación del proyecto de un medio experimental de expresión estudiantil es el desarrollo de una guía de estilo que contemple el concepto del medio, su política editorial, la presentación de la información, el tratamiento de las imágenes y aspectos más específicos como el tipo de fuente y la disposición de los párrafos en la publicación.

La audiencia de un periódico en Internet contempla los 400 millones de cybernautas que navegan diariamente por la red de redes; sin embargo, en el caso de El Comunicador se cuenta con 492 estudiantes, 37 profesores y demás público interesado o relacionado con la comunicación social que se mantiene en constante interacción.

Existe evidentemente una necesidad, que es la base de la mercadotecnia, la cual vendrá a ser satisfecha por un periódico digital de acceso al alumnado, de tener un medio de expresión estudiantil que coloque en agenda pública los trabajos realizados para la universidad.

Una campaña publicitaria abarca diferentes aspectos, pero lo esencial es el concepto que se desea transmitir, además de trabajar lo mejor posible la dimensión estética, enfatizando en las funciones fáctica y conativa de un cartel, un banner, un comercial televisivo o radial.

Para El Comunicador, se desarrollaron dos carteles impresos y un tríptico informativo, los cuales fueron aplicados en febrero de 2002 y según un trabajo de investigación, realizado 6 meses después, la campaña consiguió los objetivos deseados, dando a conocer la existencia del periódico digital a un 78% de la población estudiantil y obteniendo que un 32% de los alumnos lo hayan visitado.

Es necesario también estar claros en cómo se aborda una estructura laboral en un medio de comunicación en Internet, definiendo las figuras claves en el periódico. El Consejo Editorial es el encargado de buscar, revisar y jerarquizar la información y los artículos producidos en las aulas de clase, con la ayuda de los profesores de las materias para los que hayan sido realizados dichos trabajos.

En cuanto a los aspectos más técnicos, se encuentran el Webmaster y el Webdesigner, el primero es el responsable de colocar el periódico en la plataforma de Internet y el segundo de diseñarlo en los paquetes informáticos especializados.

Por último, las figuras más importantes de este proyecto experimental son los Productores de Contenido, es decir, los cyberperiodistas emergentes, quienes proveerán al Consejo Editorial de los trabajos realizados en clase o de las pautas especiales que quieran cumplir para este medio de divulgación que desplaza la vieja concepción de estudiantes pasivos. Así pues, serán los estudiantes quienes ocupen estos cargos y en ocasiones especiales también podrán los profesores utilizar el periódico para difundir sus trabajos y artículos dentro de la comunidad universitaria.

Este medio experimental soporta además un formato multimedia interactivo, lo cual Mirabito (1998) define como la integración de diferentes tipos de medios en un solo documento, que puede componerse de textos, gráficos, sonido digital, vídeo y otros tipos de información.

Aunque los periodistas no están obligados a conocer a profundidad los aspectos técnicos de Internet, los participantes del proyecto del periódico digital deberán conocer la estructura tecnológica necesaria para hacerse responsables de la elaboración y conducción de este medio de comunicación y estar al tanto de las herramientas que ofrecen las nuevas tecnologías.

Particularmente, El Comunicador ha realizado talleres de formación y adiestramiento en el software requerido para crear páginas en Internet. Inicialmente se trabajó con Frontpage de Microsoft, pero este año se acordó, por encontrarle más ventajosa, usar la aplicación Dreamweaver de Macromedia.

De cualquier manera, es más importante que los futuros profesionales de la comunicación estén claros en los aspectos de los contenidos en Internet. La autora Hart (1998) menciona algunas características del periodismo online como: claridad, brevedad, precisión, uso del hipertexto o escritura no-lineal, inmediatez, actualización, bidireccionalidad, fragmentación del público, especialización de los periodistas y lenguaje específico.

Aunque la fotografía digital no es un tema relacionado directamente con Internet, sí que proporciona a los diseñadores de páginas web y a los particulares un poderoso medio de publicar imágenes en la Red con simplicidad y sencillez. Las cámaras digitales captan las imágenes y las reducen a bits que pueden ser almacenadas en un archivo y traspasadas con toda facilidad a un ordenador. Allí pueden ser manipuladas y finalmente pasadas a la Red.

La fotografía digital desde hace algunos años comienza a imponerse y a desplazar a la fotografía tradicional, dados los criterios de rapidez, economía y facilidad de manipulación. Así entonces, como afirma Ang (2001) los grandes periódicos han dejado a un lado el laboratorio y el complicado proceso de revelado, paro y fijado.

Es por esto que, El Comunicador, o cualquier otro medio con sus características, debe vincularse directamente con las tecnologías de la imagen digital, usando los instrumentos y herramientas que esta ofrece.

Para finalizar, se hace necesario que se exploten al máximo las posibilidades y potencialidades de un medio tan versátil como lo es la Internet, creando un mapa de navegación dinámico, en donde la escritura no-lineal contribuya a la especialización y personalización de los contenidos.

Además, se debe comenzar a pensar en futuro, integrando la radio y la televisión en este formato multimedia, dando paso a una retroactividad constante para que el usuario, que en este caso opta por ser un productor de contenido activo, se sienta cada vez más comprometido con la realización de un proyecto online, se vincule con las nuevas herramientas, con las modernas formas de hacer periodismo y se acerque a los instrumentos de la tecnología de punta en la comunicación.

Referencias:

ANG, T (2001): La Fotografía Digital, Madrid. Editorial Blume.
BETTETINI, G (1998): Las nuevas tecnologías de la comunicación. Barcelona. Editorial Gedisa.
DE LA TORRE, C (1999): Cómo entender y aplicar la metodología de la investigación. San Cristóbal. Universidad de Los Andes - Táchira.
HART, L (1998): Análisis de contenido de El Nacional Online. Tesis de grado para optar al grado de Comunicador Social en la Universidad de los Andes Táchira.
LOBO, E y RUJANO; E (2001): Construcción del Periódico Digital de la Escuela de Comunicación Social de la ULA Táchira. Tesis de grado para optar al grado de Comunicador Social en la Universidad de los Andes Táchira.
MIRABITO, G y COLOMBO, F (1995): Las nuevas tecnologías de la comunicación. Barcelona. Editorial Piados.
RIPOLL, F (1998): Estructura de la Comunicación. Madrid. Universidad Complutense de Madrid