Por Benjamín Fernández
Número
44
Uno
de los medios de comunicación que nació
pensando en ser un instrumento de difusión
de las ideas sin límites de espacio ha
sido la radio. Las emisiones en onda corta lo
prueban antes que de existieran los satélites,
la inversión tanto en tecnología
como en contenido hicieron de este medio una
herramienta que acerca o a veces, divide bajo
conceptos ideológicos diferentes la visión
del ser humano en torno a si mismo y a sus ideas.
La globalización que es básicamente
un fenómeno signado y marcado por la comunicación
y no por la economía o la visión
política de los hechos que son sus consecuencias,
ha despertado sin embargo con razón una
critica en torno a la calidad de los contenidos
mas que en el soporte técnico donde su
evolución ha sido mas rápida y
elocuente que la otra que ha sido mas lenta y
compleja que lo esperado. La digitalización
de la amplitud modulada sigue esperando a pesar
de los anuncios optimistas en torno a su evolución
que nos vienen de Europa pero lo que vemos entre
nosotros de una manera cruel es una creciente
desconfianza ciudadana hacia la calidad del contenido
que valdría la pena detenernos a pensar
de una manera mas profunda sin que la fascinación
por la tecnología termine acabando el
mismo en una nueva forma de fetichismo.
La palabra
sufre hoy de una crisis que encuentra en los
medios su manifestación más plena.
Es cierto que vivimos tiempos de incertidumbre
pero de ahí a que autores como Wurhan
concluyan que de tanto recibir noticias y hechos
transmitidos por los medios conocemos menos y
sabemos aun menos en torno a como actuar ante
estas situaciones ya es un caso grave. Aquel
autor norteamericano califico al hecho como una
nueva enfermedad que se difunde a través
de los medios y con eso titulo su propio libro:
“Ansiedad informativa”. (Information
anxiety del original en ingles) Este tema
sobre el que cabria sentarse y profundizar nos
lleva a plantearnos el desafío de hacer
de la radio un instrumento que por su perfil
y sentido se convierta en el recuperador de la
palabra como vinculo creativo y reflexivo y que
nos permita evitar caer en la ansiedad que destruye
o en la incertidumbre que devino en atributo
y referencia de los tiempos de la globalización
y la digitalización. Porque el efecto
de la evolución tecnológica no
es solo cambiar de lo analógico a lo digital,
hoy se habla de un periodismo digital como contraste
del analógico distrayendo nuestra percepción
en torno al sujeto que es el verdadero referente
en estos tiempo. La crisis no esta en el adjetivo
sino en el sujeto, es el periodista sea analógico
o digital (si vale la clasificación) el
que debería redescubrirnos y maravillarnos
con un mejor uso de la palabra y una articulación
mas creativa en torno a las posibilidades que
brindan hoy las nuevas maravillas tecnológicas.
Necesitamos más que periodistas, exegetas
de los tiempos que vivimos y que vendrán
y contadores de historias que no reduzcan el
verbo ni al insulto soez que degrada y mucho
menos al rumor maledicente que divide. Debemos
ser reconstructores de la palabra para a su paso
acabar con la ansiedad y la con incertidumbre
devenidos en virtudes del tiempo que nos toca
vivir.
El año pasado hemos
publicado un libro denominado TEXTUALMENTE..
Radio-grafía de un país en crisis”
donde a lo largo de sus 200 paginas hemos visto
al Paraguay reflejado a lo largo de unos 30 programas
que encararon igual numero de temas y en donde
me toco escribir los ensayos de sustentación
que fueron enriquecidos con la participación
critica de mas de 150 oyentes que aportaron ideas
y opciones que me ha permitido observar la riqueza
y la fascinación que tiene la radio y
en especial la palabra, para re-construir comunidades
fragmentadas o rotas. La gente quiere participar
informadamente solo hace falta mayor creatividad
y cercanía para hacer realidad el concepto
de John Dewey que comunidad+comunicacion=democracia.
Queríamos demostrar y lo demostramos,
la fascinación de las ideas y la magia
de las palabras para acercar en un dialogo rico
y generoso puntos de vistas anteriormente abandonados
o desconocidos entre los ciudadanos-escuchas
de Radio Libre.
La radio
como plaza pública
Hace falta una
radio que convierta sus programas en espacios
públicos de crecimiento. Si las plazas
cumplían ese rol físico en otros
tiempos para convertirse hoy en espacios físicos
inseguros de nuestras vidas, la radio tiene que
ser la nueva plaza publica que permita desde
la palabra acércanos, maravillarnos y
por sobre todo re-crearnos la eterna magia y
encanto del verbo y no un espacio anárquico
e inseguro para todos. Nuestros jóvenes
están muy lejos del uso de la palabra
como herramienta para vehiculizar sentimientos
de alegría y frustración. Los chats
y las comunicación telefónicas
vía celular hoy son de un ahorro de palabras
que incluso tienden a establecer una nueva gramática
en la verbalizacion de la relación humana.
Debemos pensar en las radios de amplitud modulada
cuyo perfil en muchos casos se acerca mas a la
utilización de palabras mas que música
como herramienta de redescubrir la capacidad
de contar pero también de acercar a comunidades
completas que hoy encuentran en la violencia
física en los estadios y calles una manera
de proyectar su bronca ante una realidad que
no entienden y a un futuro que casi no existe.
Thomas Emerson en su tratado sobre libertades
públicas hablaba de la importancia de
la libre expresión que afirmando entre
sus virtudes la posibilidad de que a través
de su uso se redujera los niveles de violencia
debido a la posibilidad de administrar disensos
a través del civilizado método
de la discusión de las ideas. La radio
tiene en ese sentido un rol nuevo en esta globalización
que descoloca y cambia por completo la funcionalidad
del edificios social construido en los últimos
300 años. Debemos centrarnos en nuestros
contenidos. Revisar el uso de la palabra para
ver como atraer audiencia y mantenerla a través
de programas que realmente sean atractivos y
que permitan entender el mundo que vivimos y
por sobre todo revalorizar a su paso la palabra
el elemento fundacional de todo medio de comunicación.
Hay evidentemente una necesidad
de estudiar el contenido y el lenguaje de la
radio. Ver como combinar los recursos existentes.
Radio Libre ha iniciado desde el año pasado
con su Centro Tecnológico de Información
y Comunicación (CETICOM) la formación
de periodistas que utilicen tecnología
digital orientada hacia la calidad de los contenidos
radiales. Nuestra idea es responder sino a la
misma velocidad y compresión de formas
que nos sugiera la digitalización o la
invitación que nos presenta hoy Internet
para globalizar nuestros contenidos, a una audiencia
nueva que no tiene opciones y a un publico leal
que no se maravilla para nada ante una realidad
viaje que solo recrea el pasado nostalgioso pero
que no responde para nada ante audiencias emergentes
o hechos similares.
En el animo cierto de democratizar
el alcance de la información a sectores
que de otra forma no podrían acceder a
ella hemos creado la Agencia de Noticias Temáticas
(ANOTE) que utilizando una combinación
de Internet mas beeper hemos alcanzado a radios
alejadas de los centros urbanos y sin acceso
a Internet noticias de los hechos de actualidad
al minuto y además un seguimiento especifico
en torno a los ejes temáticos que demandan.
Así por ejemplo la Radio Nueva Esperanza
del distrito de RI 3 Corrales en el departamento
de Caaguazu uno de los mas pobres del Paraguay
según el ultimo censo recibe información
proporcionada por esta agencia innovadora en
su contenido y forma en todo el mundo desarrollado.
Desde ANOTE se hace un seguimiento de las actividades
de los legisladores de la zona, precios de productos
agrícolas en los mercados locales e internacionales,
entrevistas a actores específicos que
han visitado esa region y prometido algo para
hacer un seguimiento en torno a esas promesas.
La irrupción de esta agencia especialmente
en la manera de combinar un portal de Internet
como www.vivaparaguay.com y el acuerdo firmado
con la empresa Skytel nos permite llegar a comunidades
que nunca antes habían tenido acceso a
los diarios del día y a las radios metropolitanas
o urbanas. El proyecto patrocinado por la Universidad
Internacional de la Florida (FIU) de EEUU es
implementado por la Fundacion Libre y el INECIP.
Esto ha democratizado enormemente la información,
la ha descentralizado y ha permitido a través
de una tecnología simple y fácil
llegar con información precisa y apropiada
a comunidades que de otra manera estarían
simplemente incomunicadas.
Necesidad
de un nuevo lenguaje
El diseño
de los formatos es otra de las claves de la radio
moderna que la digitalización nos presenta
como desafío. Hoy tenemos que reconvertir
nuestras radios en herramientas nuevas con formatos
de programas que respondan a la manera como nos
vemos y retratamos a la sociedad en la que vivimos.
Debemos ser innovativos en la presentación
de los mismos, utilizar los programas de edición
que vuelven mas amigables y fáciles la
manera de estructuras programas y buscar captar
nuevos talentos que hoy no se encuentran fácilmente
en el mercado. Estamos en Radio Libre convocando
a nuevos talentos de radio para que envíen
en formatos wap o mp3 trabajos que han sido editados
en cool edit desde sus casas y que nos presentan
desafíos nuevos y formulas también
iguales. Debemos salir del ambiente encasillado
y rígido en el que vivimos durante mucho
tiempo. La radio tiene que salir en busca de
su audiencia , se acabo el tiempo en el que los
oyentes venían y los gerentes y administradores
así como los locutores disfrutaban del
misterio que representaba una voz concentrada
en un receptor. Hoy debemos buscar nuevos nichos
imaginativos en oyentes nuevos y en espacios
donde anteriormente no creíamos que fuera
posible hallar quienes nos fuercen a renovar.
Vivimos el siglo del conocimiento,
el mismo ahora es portátil como la radio
cuya virtud de transportación fácil
revoluciono el concepto de cercanía y
desplazamiento de los medios. Pero sin embargo
hoy estamos lejos del oyente, confusos ante su
lenguaje y dubitativos para innovar para usar
las herramientas nuevas. El CETICOM ha encontrado
en sus primeros 14 meses suficiente masa crítica
en sus alumnos que nos han permitido variar esquemas,
buscar re-evaluarnos en el uso de la palabra
y por sobre todo ganarnos una audiencia nueva.
No ha sido fácil para una radio como la
nuestra apostar a esto en medio de la mayor crisis
económica del sector que se tenga memoria.
Pero no nos queda otra opción, lo otro
es simplemente perecer o entregarnos a alguna
secta que nos anuncia el Apocalipsis inmediato
y cercano. Creo que la crisis es un momento de
oportunidades y miedos. Debo concluir que la
experiencia de los medios en Paraguay ha demostrado
que es más fácil vehiculizar la
frustración de la gente apuntando al corazón
de su bilis y hacer de la radio en un especie
de vomitatorio público o de catarsis colectivo
donde la desgracia de uno pasa a convertirse
en elemento de socialización y disfrute
colectivo. La globalización, tan demonizado
por muchos, es un realidad y la radio nunca huyo
de ella, siempre la vio como una manera de llegar
mas lejos y en ese sentido la innovación
tecnológica supone hoy con Internet una
maravillosa forma de acercarnos a un publico
nuestro que vivía muy lejos de nuestras
posibilidades tecnológicas y que hoy abarata
notablemente las posibilidades de estar cerca
de ellos. También creo que internet es
una invitación para hacer de sus espacios
y anchos de banda una programación diferente.
Ciertamente hay muchos impedimentos aun en la
región pero no seria mala idea comenzar
a trabajar un lenguaje en la red de redes que
nos permita ganar una audiencia extra o porque
no, hacernos propietarios de medios y con ello
acabar el pretexto esgrimido por muchos y por
mucho tiempo, de que no puedo ser bueno porque
tengo un mal propietario de radio encima. La
tecnología hoy nos permite ser dueños
de nuestro propio cerebro y lengua, en ese sentido
Internet es el fin de muchas excusas en las cuales
algunos encontraban fundamentos y otros, simples
pretextos para encubrir mediocridades y limitaciones.
Oportunidades
sobre el fetichismo
En la globalización
y la digitalización la radio tiene mucho
por ganar en términos técnicos,
pero no debe fascinarnos ello sin entender que
al mismo tiempo y completamente independiente
a los medios de transmisión hay un grave
problema del lenguaje en la radio que necesita
incorporar talentos de inmediato de manera a
evaluarnos de forma critica que es aquello que
no funciona como debiera y es especial respondernos
el porque. Seria bueno que desde la radio escucháramos
mas a la audiencia, nos acercáramos a
públicos potenciales a los que tenemos
abandonado hace demasiado tiempo. Es preciso
vernos reflejados en esa misma angustia de la
gente ante la incertidumbre, acaso lo único
cierto en los tiempos que vivimos. Pero para
eso hace falta redescubrir la palabra en su fase
creadora, lúdica y por sobre todo cercana
y autentica no exenta de inconformismo ni de
crítica.
Es preciso redescubrir el
rostro del servicio de la radio y menos concentrarnos
en la visión de ella como poder en manos
de sus propietarios o comunicadores ocasionales.
El escaso apoyo a la democracia paraguaya según
el ultimo informe del PNUD dado a conocer en
Lima hace un par de meses es una llamada de atención
y de recordación que los medios han ignorado
o alimentado con una información de pobres
calorías democráticas el compromiso
del ciudadano a construir un espacio de libertad
con oportunidades. Centrarnos en esa idea reduccionista
de los medios como poder y no como servicio ha
llevado a una de las crisis mas profundas de
financiación de los medios en el Paraguay.
El gasto en publicidad para mas de 200 radios
legales e ilegales, 5 diarios y cinco canales
de televisión no alcanza a 40 millones
de dólares anuales muy distantes de los
150 millones de hace cinco años. Por una
cuestión de supervivencia necesitamos
unos medios más cercanos a la gente, aliados
de su porvenir y críticos a los poderes
públicos. Pero por sobre todo necesitamos
recuperar con urgencia el entusiasmo en la democracia
por parte de los paraguayos que somos en la región
el país como menos adherentes a este sistema
politico de “oportunidades” como
lo definiera Jefferson.
En términos de integración
regional creo que la radio debe jugar un rol
mas activo. El fracaso de América Latina
es no haber entendido nunca que mientras no haya
una integración que funcione a nivel cultural,
los acuerdos políticos y económicos
nunca podría concretarse más allá
de las fotos de ocasión que los políticos
se toman cada cierto tiempo. Internet ha abaratado
los costos es cuestión de echar mano a
este nuevo medio de comunicación y montarnos
a su tecnología desafiantemente barata
para apoyarnos en nuestra infraestructura radial
para hacer la verdadera revolución del
lenguaje que es lo que de verdad necesitamos
en estos tiempos de la globalización en
donde las cifras y la estadísticas pretender
acabar la comprensión de hechos complejos
que solo a través del lenguaje podrían
ser comprendidos.
Mucho se avanzaría
si desde la radio, la palabra redescubre la relación
con sus oyentes fieles y gana espacios entre
los jóvenes, si lo podemos hacer de forma
innovadora y creativa habremos disminuido la
incertidumbre, frustración y malestar
que genera la globalización y el cambio
de los paradigmas en la Produccion así
como evitaríamos caer en el fetichismo
tecnológico que reduce a la comunicación
a una compresión de bandas y calidad de
emisión.
Benjamín
Fernández Bogado
Director de Radio Libre,
Paraguay. |