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2006

 

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Los Candidados Desde el Diván
 

Por María Teresa Mendoza y Mery Chomer
Número 49

Este texto no intenta ser el análisis clínico de varios personajes públicos, sino un intento de ver más allá de las palabras, de lo que se dice, un intento de anticipar qué tipo de liderazgo nos ofrece un candidato, si se mira bajo el ojo analítico del psicoanálisis. Desde luego, muchos datos escapan al análisis pues éste no se basa en una entrevista clínica sino que se efectúa a través de las apariciones públicas de los personajes, de lo que proyectan en sus discursos y de alguna información de su vida privada.

AMLO
López Obrador fue el hijo primogénito, y debemos considerar, que la posición de primogénito, generalmente, hace que los padres pongan muchas expectativas en ellos, impulsándolos a ir tras grandes posiciones y logros por lo que pueden tener una tendencia mayor a conseguir las metas que se fijen.

Por otro lado, la responsabilidad que se les exige es mayor, y a edad más temprana, cuando las familias son grandes, (como en este caso) son impulsados a ocuparse de sus hermanos menores, lo que hará de la responsabilidad una característica prematura y constante.

AMLO debió crecer con grandes responsabilidades hacia sus hermanos y expectativas por cumplir hacía sus padres. Es probable que haya sido más que un hermano con los menores y haya fungido como padre en varias ocasiones.

Hay pocos datos de su infancia pero es indudable la culpa que debió sentir al ver morir a su hermano de forma accidental. Los padres debieron haberlo rechazado o culpado en algún momento ya sea abierta o indirectamente; tal vez, por no haberlo protegido o por no haberlo evitado. El cambiar de lugar de residencia después del accidente pudo ser un intento de huida.

En el caso de los accidentes producidos por una conducta arriesgada, como el uso de un arma, la comunicación entre los miembros de la familia puede complicarse, pues el que lo presenció a veces no tiene las respuestas que los otros necesitan; especialmente los padres.

La pérdida debió haber ocasionado cambio de roles, y muy probablemente AMLO tuvo que demostrar una nueva fuerza ante un suceso trágico e inesperado que seguramente provocó síntomas familiares, pues un cambio en una parte de la familia generalmente ocasiona cambios en todos sus miembros.

No podemos ignorar que el lugar no cambia los hechos, y por lo mismo debieron haberse llevado con ellos la tragedia. La entrega y la necesidad de trascendencia de este candidato podría ser una forma de darle sentido a su vida como forma de compensación.

Existen ciertos toques de misionero en sus discursos ya que parece querer arreglar al mundo, aliándose a los desprotegidos como seguramente debió sentirse a partir de la pérdida del hermano. Además, muestra un intento de inculpación dirigido hacía su persona, quedando claro el enfrentamiento con la, falta, la injusticia, la pérdida y la muerte. A ello. podemos sumarle una nueva pérdida: la de la atención de los padres por estar involucrados en su propia pena.

Cabe suponer que el cambio de lugar para vivir generó angustia, y hubo que pasar un periodo de acomodación y reconstrucción para un nuevo funcionamiento. Es imposible superar una pérdida sin una experiencia de duelo, y es una tarea adaptativa difícil. La muerte cercana marca profundamente a los familiares, lo que pudo acelerar la madurez y cambiar la visión de la vida de AMLO, dándole importancia a sus creencias y valores, exacerbando su narcisismo e intentando destacar sin importarle mucho los medios.

¿Cómo es AMLO? Es un político madrugador. Comienza su jornada a tempranas horas, no se responsabiliza por las acciones de sus empleados, y sufre de una sensibilidad extrema que casi se antoja paranoica al considerar los sucesos negativos como un complot perpetrado en su contra. Busca ser aceptado por el pueblo como el político que piensa en ellos regalando un dinero que obtiene del erario público, desviando los fondos necesarios para administrar adecuadamente el cargo público que sustentaba. ¿En qué nos basamos para afirmarlo?. En lo que hemos visto hacer a este personaje en el quehacer diario de nuestra descuidada ciudad.

Libidinalmente estamos ante una persona que persigue agresivamente sus metas e ideales y se muestra dispuesta a agredir a quien le impida conseguirlos. Necesita ser el centro de atención de los demás y se sorprende y resiente si no la obtiene. Espera que le brinden un trato especial que siente merecer, ya que su ego se satisface cuando lo obtiene y se resiente ferozmente cuando no lo obtiene. Así, encontramos un narcisismo exacerbado y vuelto contra su propio ego. Esta persona parece tener su autoestima centrada en sus logros y en el éxito que obtiene de ellos, en el dinero, el estatus y el poder económico.

Su personalidad está lejos de provocar indiferencia, levanta respuestas fuertes de elogio o crítica y despierta pasiones. Su fuerza genera críticas, pero también miedos y envidias, pues no podemos ignorar que ha sabido ganarse a un gran sector de la población.

Se relaciona con los demás si los otros le sirven para satisfacer sus necesidades y si éstos le reconocen supremacía. Necesita de la aprobación y reconocimiento de los demás para sustentar su autoestima. Parece necesitar el apoyo externo, eso le da su fuerza, y ha sabido ganarse a la gente porque ha jugado el papel no sólo de espectador sino de participante. Es uno mas del “nosotros” dentro de un marcado “ellos”.

Frecuentemente siente que los demás le traicionan, y le confirman con ello la desconfianza que de manera natural siente hacia los otros. Por esto se mantiene a una distancia afectiva que le parece segura y prefiere apegarse al status, al dinero y al poder, que a las personas. No parece tener vínculos estrechos con nadie además de sus hijos, sin embargo hubo figuras importantes en su infancia que le permitieron individualizarse y lograr su autonomía.

Le agrada controlar lo que sucede en su entorno para sentirse seguro, le desagradan los cambios abruptos y los imprevistos, planea con anticipación sus movimientos y esconde concienzudamente sus emociones para evitar que le puedan lastimar.

Los rasgos obsesivos se manifiestan en la preocupación excesiva por la puntualidad, el orden, la escrupulosidad en su arreglo personal y en el control de hasta el más mínimo detalle. Se refleja también en la exigencia del trabajo hacia sus subalternos y empleados, tendiendo a devaluar las contribuciones de los demás.

Altamente defensivo de conducta rígida y poco espontánea; se esfuerza por controlar, no sólo su conducta sino también sus expresiones faciales. Va despacio, utiliza la paciencia, no para en esfuerzos, es lento para el desánimo, pero rápido para el ataque. Fue escalando peldaños desde abajo, no desistió ante las derrotas y poco a poco se ganó un lugar importante entre la gente. Sin embargo, puede cuestionarse su poder político, teniendo en cuenta el poco control que tuvo sobre sus allegados y los fraudes que éstos cometieron.

Podemos comentar también de poder social, pues AMLO ha sido capaz de influir en el comportamiento de un gran sector de la población, lo que quedó plasmado sobre todo en la reacción del pueblo ante el intento de desafuero. Para esto, ha ofrecido recompensas materiales, como el dinero a las personas de la tercera edad y recompensas psicológicas como, asumirse como parte del pueblo, hablando de sus necesidades e incluyéndose en ellas y en su lucha

Su estilo conductual es jactancioso, vanidoso, snob, seguro de sí mismo, impaciente, arrogante y presuntuoso.

Su estilo interpersonal parece ser desdeñoso de los demás, explotativo, socialmente superficial. De personalidad analítica y calculadora parece sostener muchas relaciones interpersonales aunque poco profundas. Tiende a ser poco empático y a usar a los otros para satisfacer sus propias necesidades sin tomar en cuenta las de ellos. Las relaciones que tiene no son al azar, sabe cómo,cuándo y con quién. Parece guiarse por su “moralidad”, lo que debe tener un fondo religioso, cuya terminología ha incluido en sus discursos, como cuando acusa a sus enemigos de ser “las fuerzas del mal”.

De estilo cognitivo expansivo y exagerado, se centra en imágenes y temas, no profundizará en ellos. Persistente e inflexible, se toma libertades con los hechos.

En cuanto a su estilo afectivo, este tipo de personas oscilan entre la autoconfianza y la rabia narcisista cuando se sienten frustrados. Temperamentalmente activos y sensibles, desarrollan talentos especiales. Se sienten atractivos y presentan un desarrollo precoz del lenguaje en su infancia, manejándolo con facilidad. Se relacionan de manera temerosa y devaluadora con los demás. Pasan de la idealización a la devaluación de un momento a otro sin justificación para ello.

El mandato Parental que introyectaron parece ser: “Crece y sé maravilloso para mí”. El autoconcepto que desarrollaron:“ Soy único y especial, merezco privilegios; estoy destinado a tener derechos extraordinarios, sin importar si los merezco o no”.

Todo lo anterior los lleva a formarse una percepción del mundo en el que ven “la vida como una mesa de banquete para ser probada a voluntad. Las personas Me deben admiración y privilegios. Por ello espero y demando un Trato Especial”.

Parece ser muy selectivo, su pasión es la política, su interés, la familia, y lo demás es secundario.

Este tipo de personas suelen mantener un sentido grandioso de sí mismas, esperan estándares implacables en los servicios de los demás, exigen siempre un trato especial. De autocontrol insuficiente, las frustraciones les conducen a explosiones abruptas e incontrolables en las que dan rienda suelta a la rabia narcisista insatisfecha.

AMLO posee características indiscutibles de líder, pues ha sobresalido dentro de su partido, ha logrado motivar a los demás por sus intereses y acciones, y de cierta forma ha logrado tener carisma, teniendo la capacidad de demostrarlo.

A pesar de todo; no cabe duda que es un hombre de victorias y derrotas, y para ambas hay que tener fortaleza pues las victorias requieren agallas y riesgo, y las derrotas, fuerza para superarse.

Es un hombre insistente y luchador, aunque no sorprende pues parece una cualidad generalizada de los políticos cuando persiguen un puesto importante. La lucha forma parte de su vida.

La renovación es parte de su discurso, sin embargo sus ideas no siempre parecen reales. Es conciliador, pero difícil de quedar bien con todos, y por lo mismo, lo que dice y lo que hace no siempre tiene coherencia.

El liderazgo y el narcisismo casi siempre van de la mano, sin embargo existen diferentes tipos de liderazgo, En cuanto a su estilo de liderazgo, estas personas suelen adueñarse de las ideas y propuestas de otros, llegando incluso a convencerse de que ellos las idearon. Saben utilizar sus habilidades persuasivas para convencer a otros que trabajen para ellos, pero llegado el momento salen detrás de bambalinas y toman la gloria para sí mismos. Pero, si fracasan culparán implacablemente a los otros por sus fallos.

El trabajo que ha realizado nos habla de un gran organizador, un hombre controvertido, que ha aprovechado la parálisis Foxista y ha buscado, sobre todo, beneficios visibles, que tal vez no han beneficiado tanto a la ciudad como a su propia imagen. Busca la trascendencia, dejar su nombre en los textos y más adelante, en la historia.

Es atacado constantemente, y a su vez, su defensa es el ataque, a veces indiscriminado, confuso y mezclado. Se dirige a la gente con adjetivos descalificantes, hace bromas que lo hacen ver poco serio, juega con el lenguaje y con el discurso, lo que le ha valido la burla de los que no comparten su ideología.

Finalmente, AMLO es todo un personaje, no sabemos si seguirá ascendiendo o será una más de las propuestas que quedan en el camino, pero podemos refrendar lo que bien dice Serrat: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”.

Dr. Simi
Este personaje se ofrece al pueblo como un “rescatador”, hermano de González Torres del partido Verde, empresario y profesionista talentoso. ¿Por qué desea convertirse en Político?. ¿Acude a la política para afianzar su exitosa empresa internacional, o movido por un auténtico deseo altruista de ayudar a los menos favorecidos?. ¿Cómo es esta persona?.. Veamos. Por lo que proyecta, se trata de un hombre inteligente, empresario exitoso, solitario, divorciado, con dificultades para articular el lenguaje y para caminar (dificultad que le acompaña desde la infancia). ¿Qué nos revela de su personalidad?.

Una persona quien padece una dificultad especial, presenta una vulnerabilidad narcisista que lo hace a sus propios ojos diferentes de los otros (aquellos quienes no tiene esa dificultad).

Esta vulnerabilidad lleva a la persona a esperar recibir compensaciones (gratificaciones) de otros, que van más allá de lo que le pueden dar. Después de todo, si se ha sufrido por un defecto, el mundo, la vida y los demás tienen que compensarle por lo mucho que sufre y ha padecido. Así, estas expectativas exacerbadas nunca son suficientemente gratificadas y conducen a: Frustraciones narcisistas y/o Ansiedades narcisistas.

Las frustraciones narcisistas con el tiempo se transforman en Rabia narcisista que se manifiesta en una sobre modulación de los afectos y en conductas que toman la forma de rabietas explosivas en las que se suele dar rienda suelta a los enojos sin la posibilidad de auto controlarse.

Las ansiedades narcisistas, con el tiempo, se transforman en distorsiones cognitivas para proteger el propio ego mediante el uso excesivo de la identificación proyectiva, depositando en los otros emociones e ideas que provienen del sí mismo, pero que resultan intolerables en uno mismo y que provocan un gran monto de ansiedad. Así, al depositarlas en otros, la ansiedad interna disminuye y los sentimientos negativos se depositan en los otros.

Las ansiedades y frustraciones narcisistas se transforman en conflictos interpersonales frecuentes, somatizaciones y diversos síntomas. Llegan a la ulterior confirmación de que los demás no son dignos depositarios de la confianza herida, pues no otorgaron las gratificaciones demandadas.

Así, su estilo relacional es estar siempre en guardia, a la defensiva y alertas, hipervigilantes, buscando pistas que les revelen la verdadera intención de los motivos de las demás personas. Se resisten a aceptar consejos o a recibir influencias de otros. Crónicamente tensos, constantemente se movilizan contra amenazas reales o imaginarias urdidas contra ellos.

Su estilo interpersonal es desconfiado y receloso, guardan secretos, tienden a aislarse a mantener una distancia afectiva en sus interacciones. Hipersensibles a la crítica y a la falta de aprobación, tenderán a culpar a otros y a ser provocativos sin darse cuenta de ello. Oscilan entre la desconfianza y el abuso por la imperfección ajena.

Su estilo cognitivo es la desconfianza. La prudencia y la reserva les caracterizan. Actúan guiándose por ideas preconcebidas, y una vez que han formado su punto de vista, nada les puede hacer cambiar. Pueden presentar delirios en tiempos de estrés y sentirse el blanco de conspiraciones particularmente urdidas en su contra.

Su estilo afectivo es sobrio, serio, sin sentido del humor, de afectos restringidos; muy celoso, fácilmente se siente provocado. Activo e hipersensible, estas personas suelen ser exitosas en su vida laboral.

Su apego es temeroso, pues se vinculan a otros, siempre temiendo que los puedan traicionar, lo cual inevitablemente sucede.

Los comandos paternales que estas personas introyectaron de sus padres son: “Tú eres diferente, debes mantenerte alerta y no cometer errores”. Esto llevó al niño a verse a sí mismo como: “Yo soy especial y diferente; estoy sólo y no le gusto a nadie, en el fondo merezco más que los demás”

Todo esto conduce a desarrollar una percepción del mundo y de la vida como: “El mundo es impredecible, injusto y demandante, se torna furtivo y lastima; por lo tanto debo mantenerme alerta, en guardia y contra-atacar. No puedo confiar en nadie y debo excusar mis errores y fallas culpando a los demás por ellas”.

Estas personas constantemente sospechan de otros sin tener bases suficientes para ello, y explotan a los demás por el sentimiento de culpa que les provocan. Se resisten a confiar en los demás por un temor irracional de que todo será utilizado en su contra. Encuentran maldad escondida y amenazas en eventos insignificantes o inclusive hasta benignos. Guardan rencores y no perdonan hasta los insultos más insignificantes. Cuestionan sin justificación la fidelidad de su pareja, amistades y asociados laborales, sintiéndose con el derecho para hacerlo.

Fácilmente se siente menospreciado, siendo muy veloz para reaccionar con enojo o contra-atacar. Su estilo de liderazgo es autoritario y espera una sumisión absoluta a su autoridad. Este tipo de personalidades tienen problemas para delegar tareas, puesto que nadie las hará mejor que ellos: revisan una y otra vez los trabajos que efectúan sus subalternos ya que no confían en ellos.

Felipe Calderón
Candidato joven y hasta cierto punto; desconocido para el grueso de la población. Abogado y economista, con un acervo cultural e intelectual importante. Joven, tal vez demasiado, ambicioso e inteligente, ha sabido resolver con éxito los problemas que se le han presentado en su carrera política.

Cree que él debe solucionar los problemas de México, pues se tiene confianza y es protagónico. Tiene características de líder, y por lo tanto un marcado narcisismo. Ha tenido un ascenso marcadamente acelerado lo que deja de manifiesto, su habilidad, inteligencia, creatividad, liderazgo y función de equipo. Sin embargo, queda claro, un grandioso sentido de autoimportancia, y hasta cierto punto fantasías de éxito ilimitado sobre todo en cuanto a su poder político.

Se cree especial y único, unicidad que defiende a través de la mercadotecnia, basándose en sus logros y su juventud esperando la admiración de los demás.

Es muy pretencioso, (característica general de los políticos), habría que ver qué tan reales son sus expectativas y si realmente tiene la capacidad y los medios personales y de equipo para llevarlas a cabo. Tiende a sobrevalorar sus capacidades.

Su Autoestima parece aumentada, se entrega al perfeccionismo en su trabajo y por lo mismo ha desestimado en ocasiones el trabajo de los demás.

Se le imputan problemas para delegar responsabilidades y compartir, lo que se le complica bastante por su necesidad de mandato y reconocimiento. Parece tener problemas cuando los demás fallan, y esto habla de exigencia pero también de poca tolerancia hacía las cosas cuando no salen como él espera y escapan a su control.

Algunos lo catalogan como persona difícil, que cuida poco las formas, hablador, con cambios de ánimo, y por eso impredecible.

Hijo menor, tal vez el consentido, el más estimulado por los demás, más personalista, la política parece ser parte de su vida. Su padre le llevaba muchos años, y difícilmente pudo darse una relación satisfactoria para él. Además, su padre era una persona importante y destacada dentro de la política, por lo que relacionarse con él pudo ser un reto y de ahí la motivación para destacar en la política y hablar el mismo idioma. Su necesidad de trascendencia y superación pueden ser intentos de cumplir las expectativas del padre y pueden ir más allá, encuadrándose en la necesidad inconsciente de superarlo y demostrar su valor.

Demasiado estudio y cuadros de honor durante su adolescencia nos hablan de un nivel de inteligencia óptimo, pero también podría compensar las carencias en otras áreas de su vida, ocultando sus partes vulnerables.

Se dice que tiende a preocuparse en demasía, a hacer las cosas grandes, y a exagerarlas. Esto tiene sus ventajas si lo lleva a una reflexión profunda de los hechos, aunque la contraparte estaría en paralizarse y no actuar.

Ha demostrado saber aprovechar las oportunidades que han surgido en su camino, aunque no sólo las espera, también las busca, lo que queda demostrado con su carrera política.

Sabemos que en la política no es suficiente la inteligencia y las buenas intenciones del candidato, el hecho de haber destacado nos habla de un joven con relaciones, habilidades, carisma y liderazgo. Tendrá que probarlas a lo largo del camino y descartar que haya sido la “suerte” la que lo puso en el puesto que hoy sustenta.

Respecto a su juventud, aunque no va acompañada de inexperiencia, puede ser un obstáculo ante la gente que le bloqueara el camino. Aunque hay quien opina que la creatividad y los grandes cambios se generan precisamente en esta etapa de la vida.

Es un buen orador, claro, conciso, parece coherente, presenta programas serios para el país, y ha recibido apoyo de escritores, comunicadores y personajes de la vida pública.

Se habla de dos Felipes: el inmaduro y el actual. Su vida política se ha desarrollado dentro de un continuo entre la adolescencia y la madurez, y debió haberse notado entonces un cambio en la actitud y una personalidad más madura. Los errores cometidos en el pasado serán abordados una y otra vez por sus enemigos, y perdonados en nombre de la inmadurez una y otra vez por sus aliados.. En la actualidad, parece un hombre templado y controlado

En el articulo póstumo que escribió a Castillo Peraza, (Reforma, 14/09/2000), se autocalificó abiertamente como explosivo, indeciso y titubeante. Remarcaba también el arrepentirse constantemente, lo que puede estar hablando de llevar a cabo las cosas pero de no obtener lo que persigue y de aquí, el arrepentimiento. Qué tan realistas son sus metas y lo que quiere lograr están dentro de lo posible o son sueños y pretensiones dentro de su narcisismo que tienen más que ver con sus necesidades que con las necesidades del país. Características muy humanas pero peligrosas en un candidato a la presidencia, si implican, falta de seguridad y decisión, tan necesarias en la política.

Cree que puede resolver el problema de México. Fantasioso, narcisista, ambicioso, difícil de delegar oficios, hace suya una responsabilidad de millones. Prepotencia, seguridad excesiva, ésta se da frecuentemente en gente que desea por medio del éxito profesional, ocultar o tapar sus carencias y debilidades. Por eso los retos, uno tras otro y ahora enfrenta tal vez el mayor de su carrera.

Inquieto, intenso, preocupado, tiene relaciones intensas de amistad, y una mujer fuerte a su lado que no le compite, más bien lo apoya, ocupando el segundo lugar. Esto no resultará amenazante siempre y cuando ella se conserve en su peldaño y no intente escalarlo. Pues, finalmente parece necesitar a alguien fuerte a su lado, pero no tan fuerte como él.

Le gustan las carreras de autos y las corridas de toros. Ambas son desafíos, ambas implican peligros, en las dos; del otro lado, está la muerte. En forma de metáfora, es una persona valiente y retadora, le gustan las emociones fuertes y no va precisamente sobre seguro.

Cuenta con una base familiar y de amigos fuerte, constante que funciona como una plataforma en su vida, y esto implica, constancia, pertenencia, entrega, apegos y vínculos. El éxito que hoy vive y el lugar que ocupa, parece deberse a que representa una nueva opción, aunque está sea desconocida.
En cuanto a la imagen física que proyecta, nos parece grisácea, da impresión del político tradicional, que por momentos parece faltarle algo que logre convencernos, ya no emocionarnos.

La pasión por México, no parece tener mucho sentido, falta fuerza, no logra impresionarnos. Sus respuestas a los problemas actuales como el aborto, la píldora del día siguiente y muchos otros que promueven un cambio en lo actual es un constante “No”, siguiendo con la mentalidad panista. Esto nos muestra que los cambios prometidos pueden ser muy limitados

Desea que se le vea como joven, dinámico y con visión del futuro, pero nos parece rígido y poco sensible, y, por lo mismo, lejos de la imagen dinámica y nueva que desea aparentar.

Finalmente, tendremos que esperar para ver si las ideas y planes que tiene para el país, son viables y representan opciones de cambio. Y lo más importante, si será capaz de realizarlos, en caso de ser elegido presidente. El riesgo está en reconocer que el voto para él está centrado más en la insatisfacción de la gente hacia los otros candidatos que en la confianza hacía él, pues para la mayoría es “el menor de los males”.

Roberto Madrazo
Hijo de un político controversial, excelente orador y de personalidad impetuosa, se rodeó del ambiente político y creció conviviendo con los hijos de varios políticos importantes. Su relación con el padre debió ser lejana, pero no cabe duda la gran identificación que tuvo con él, que lo llevó a tomarlo de modelo y entrar a la vida política.

El supuesto accidente donde murieron sus padres, debió ser un golpe muy fuerte para un joven adolescente de 16 años. La intriga y la sospecha de asesinato debieron fomentar en él coraje y deseos de justicia. Un periodo de reacomodación puso a su hermano Carlos como padre sustituto. Estudió leyes como él y se relacionó siempre con figuras importantes de la política.

Sus deseos de superación y trascendencia pueden ser el resultado de la necesidad de continuar el trabajo del padre, de sobresalir como su modelo o de lograr lo que el padre no pudo por su muerte prematura.

Desde pequeño quiso ser gobernador, lo que nos muestra a un hombre con metas y motivación para lograrlas, logrando sus aspiraciones y convirtiéndose en protagonista de la política mexicana.

Es disciplinado y deportista, y su aspecto competitivo lo lleva en ambas para ganar. Todo parece ser válido.

En su vida se asesora, no deja cabos sueltos, es controlador, cuida mucho su imagen y es discreto en lo que se refiere a su vida personal.

Es un hombre hábil, y se le cuestionan mucho sus escrúpulos. Parece que para él, el fin justifica los medios, lo que ha hecho que gente cercana se retire, y le ha conllevado varios enemigos. Es, para muchos, un animal político.

No para en esfuerzos para lograr lo que se propone. Es vengativo, cobrando las cuentas a los que no están de acuerdo con él, y podría decirse que sacrifica a los demás pensando en su provecho.Sabe utilizar el dinero para comprar los votos del pueblo, y se le acusa de fraude y corrupción .

Su conducta es altamente psicopática. Esta conlleva agresión, rebeldía, problemas interpersonales, egocentrismo, autoritarismo, manipulación, resentimiento y actos imprevisibles. Podrían cuestionarse sus valores morales y sus lealtades, pues con sus características, estas últimas, no parecen ser duraderas.

Definitivamente tiene características de líder y un perfil de ganador, sin embargo se le adjudican el fraude y la mentira como parte inherente de su personalidad. Los escándalos le han dado muy mala imagen, y los que lo conocen saben el valor que para él tiene el dinero y la forma en que lo relaciona con el poder; su propio poder.

Su discurso es democrático, totalmente incoherente con lo que sucede en el país, incoherencia que no permite que la mayoría se identifique con él. Su imagen y su discurso no logran separarlo del priísta tradicional, por lo que difícilmente podrá lograr la imagen de confianza que persigue. Busca el protagonismo, se siente impune, y su meta es ganar. La ética no cuenta, y lo dirige la ambición y la obsesión de ser presidente de México.

Madrazo presenta un trastorno narcisista de la personalidad, que se caracteriza por el amor a sí mismo. Vivimos en una cultura narcisista, y la política no es la excepción sino la regla del mismo, donde el ganar parece justificarlo todo.

Roberto Madrazo, presenta en sus relaciones necesidad de gratificar sus propias necesidades y aborda a las personas como objetos a ser utilizados y descartados de acuerdo a sus fines.

Su estilo es arrogante, demanda ser el centro de atención y el elogio de los demás.

No podemos negar que estamos ante una persona inteligente, un político hábil, con metas claras y fuerza para lograrlas. Sus fantasías son de éxito ilimitado, el poder parece justificarlo todo, se cree especial y su deseo es que se cumplan automáticamente sus expectativas.

Es pretencioso e interpersonalmente explotador, saca provecho de los demás para alcanzar sus propias metas, y difícilmente se identifica con las necesidades de los otros.

Sin embargo, sabe que el partido que representa lejos de cumplir, ha decepcionado; y sus intentos de convencer involucran a otras personas ante la inseguridad de no lograrlo sólo, lo que indica falta de confianza en él mismo y en lo que está representando.

Es curioso ver como no confía en la memoria del pueblo que ha vivido muchos años de robos, mentiras, y pobreza. Cree que por medio de su discurso logrará que la gente olvide la extorsión sin medida que ha sufrido. Lo increíble es que se cree capaz de lograrlo, desestimando la conciencia de los mexicanos. Esta completamente abstraído en sí mismo.

Ha sido acusado de fraude, ha gastado el dinero de todos para su causa, su campaña y sus fines, pero no se siente culpable, sus defensas le impiden la toma de conciencia.

Es calculador, evita las situaciones vulnerables, estudia al otro para saber cómo comportarse, y a aquellos que no están de acuerdo con él los considera perseguidores.

Psicodinámicamente, posee un self grandioso, que se niega a depender de los demás pero intenta impresionar y ser aprobado. Tiende a ser destructivo con aquellos que lo amenazan, desvalorizando a los otros para adquirir un valor mayor.

El control es una de sus mayores características, y le interesa la gente que lo halaga. Podrá tener éxitos en su vida profesional, más sus relaciones interpersonales deben ser problemáticas.

Concluimos que el candidato siente una autosuficiencia omnipotente, reforzada por fantasías de grandiosidad. Su ambición y demanda nos hablan de un líder que está dispuesto a todo para lograr sus fines y así satisfacer sus propias necesidades.


Referencias:

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Kernberg, Otto (1980), Psicoterapia de los Trastornos Graves de la Personalidad, El manual Moderno, México
Kernberg, Paulina (2000), Weiner Alan, Bardenstein Karen
Trastornos De La Personalidad en Niños y Adolescentes. Cap. 10 pp.159-170
Cap. 13 pp. 211- 213 El Manual Moderno, México
Sperry, Len (2003), Handbook Of Diagnosis And Treatment Of DSM IV –TR Personality Disorders , Chapter 7, pp. 151 – 174, Chapter 9, pp. 197 - 217
Brunner, Routdlege, Great Britain.


María Teresa Mendoza, Mery Chomer Cherem