Tercera cadena; no a la competencia, sí a la concentración

México

LA CAJA DE PANDORA
LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN DESDE UNA PERSPECTIVA DIFERENTE

tercera cadena: no a la competencia, sí a la concentración

Fecha de publicación: 30 de enero de 2012

Tenían todo para cumplir con sus obligaciones y de paso hacer un trabajo de primera. El presidente Calderón, el comisionado presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), Mony de Swaan y, de pasada, el secretario de Comunicaciones Dionisio Pérez Jácome. El primero, desde la lógica de la cobertura-convergencia-competencia ofreció desde hace al menos dos años un cambio sustancial en las telecomunicaciones. De Swaan solicitó y pagó a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) un estudio sobre el sector que incluye recomendaciones tanto para el órgano regulador como para el incremento de la competencia y la modificación del régimen de concesiones. En el mismo sentido se orientaba un estudio realizado por el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE). Adicionalmente, la Cofetel organizó una consulta pública cuyos resultados arrojaban el interés de los participantes –ciudadanos, académicos y expertos- en contar con una tercera cadena de televisión. Un golpe más para quienes también ostentan el monopolio de los contenidos. Y optaron por otra vía: no a la competencia, sí a la concentración.

En mayor o menor medida y cada uno desde su ámbito de competencia, los diagnósticos eran más o menos similares y de sobra conocidos. El llamado duopolio televisivo –Televisa y Azteca- concentra un elevado porcentaje del espectro televisivo. Este escenario al que, directa o indirectamente, han contribuido ambas empresas mediante diversas estrategias tendientes a frenar la competencia en el sector. Las repercusiones son de índole diversa: la repartición de pastel publicitario con ventaja para Televisa, pero con una tajada importante para Azteca, que ha marginado a los canales pequeños.

Asimismo, con excepciones, la programación es de dudosa calidad y producida bajo la fórmula de “dar al público lo que quiere”. Pero la concentración también ha repercutido en una limitada pluralidad democrática. Los pocos análisis económicos políticos y sociales –no necesariamente los mejores- circulan a través de ambas cadenas televisivas, lo que se traduce en una limitada circulación de las ideas. En este contexto, la construcción de las agendas informativas se hace a modo, defendiendo intereses aliados y atacando a los contrarios. Basta recordar las campañas que ambos grupos emprendieron contra el fallecido empresario Isaac Saba cuando hace varios años hizo público su interés en invertir en una cadena de televisión.

A finales de 2011 los resultados de los estudios de la OCDE y el CIDE así como la consulta pública hicieron pensar que el escenario arriba descrito podría modificarse. Además, ya se habían realizado los estudios pertinentes que daban cuenta de la capacidad del espectro para dar cabida a la competencia televisiva. Pero las cosas comenzaron a oler mal a partir del 11 de enero, fecha en que se darían a conocer los resultados de la consulta y comenzaría a redactarse la convocatoria para participar en la licitación se postergaron al 18 y luego al 25 de enero. El jueves 26 los periódicos dieron a conocer que la Cofetel suspendería la posibilidad de licitar una tercera cadena de televisión abierta. A través de un comunicado nos enteramos que la propuesta había tenido un voto a favor –el de Mony de Swaan- y cuatro en contra del resto de los comisionados quienes aplazaron la discusión por tiempo indefinido "hasta considerar que han quedado atendidos elementos que están fuera del ámbito de la Comisión". Hasta ahí la información.

De poco sirvió el comunicado que el viernes 27 publicaron los periódicos el viernes 27 en sentido inverso. Es decir, los cuatro comisionados –Ernesto Gil Elorduy, Gonzalo Martínez Pous, Alexis Milo y José Luis Peralta- rechazaron haber congelado las iniciativas tanto para concesionar las frecuencias para servicios de televisión abierta como para la transición a la televisión digital. Y sirvió de poco porque evidenció la fractura entre los cuatro comisionados y el presidente del órgano regulador. Los primeros postergando la discusión –aunque con la posibilidad de reanudarla el próximo mes- y el primero a favor. En los días subsiguientes los periódicos han dado a conocer las reacciones de diversos actores –entre ellos el senador Manlio Fabio Beltrones- mostrando su preocupación por la opacidad con que se toman las decisiones en el pleno de la Cofetel. Decisiones que, dicho sea de paso, han sido de escasa repercusión para los medios electrónicos.

Cobertura-Convergencia-Competencia. Eliminar la opacidad de la Cofetel y que explique la toma de decisiones. Evitar la doble ventanilla entre el órgano regulador y la Secretaría de Comunicaciones. Modificar el régimen de concesiones. Fomentar la competencia para contribuir a la prestación de servicios. Son sólo algunas recomendaciones que la OCDE formuló en su estudio “Revisión de la Política y Regulación de las Telecomunicaciones en México” presentado el lunes 30 de enero en el Museo Interactivo de Economía.

Pocas novedades frente a un escenario de sobra conocido por académicos, especialistas, consultores e incluso por la ciudadanía que participó en la consulta y recomendó la apertura e una tercera cadena. Ninguna sugerencia sobre cómo proceder frente a las presiones de un duopolio televisivo. Ninguna sugerencia sobre cómo anteponer los intereses de la sociedad a costa de los empresariales y gubernamentales. Ninguna sugerencia sobre cómo evitar que el presidente en turno se someta a las exigencias de las televisoras a cambio de inmunidad informativa. Ninguna sugerencia, en suma, que modifique el actual sistema de telecomunicaciones y vislumbre la opción de al menos una cadena de televisión abierta para propiciar la competencia, elevar la cantidad de los contenidos y, finalmente, constituirse en una opción informativa. En suma, no a la competencia, sí a la concentración.

PANDORAMA: 1. Entre los resultados de la consulta promovida por la Cofetel estaba también la posibilidad de que los productores independientes pudieran incursionar en la televisión abierta en mejores condiciones que hasta la fecha. Un golpe adicional a quienes además ostentan el monopolio de los contenidos. 2. La guerra de los bots se acerca peligrosamente a las redes sociales. Esto se desprende de la serie de reportajes de investigación elaborados por Claudia Herrera Beltrán, de La Jornada disponibles en http://shar.es/ftic2 y http://shar.es/ftiZr. 3. Por cierto, este periódico fue el único que incluyó en su agenda la inhabilitación por diez años de Sergio Uzeta Murcio, hasta hace unos días director de Notimex. Un caso sobre el que predomina la desinformación. ¿Cómo venía funcionando la agencia bajo su dirección? ¿Cuáles son los principales problemas que enfrenta? ¿Hacia dónde va Notimex? Información únicamente disponible para audiencias de informativos radiofónicos que abordan el tema, o para la Secretaría de Gobernación, cuyas autoridades se encargarán de nombrar al sustituto y sepultar los problemas de Notimex que datan de varios años atrás.

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Claudia Benassini
Profesora de las Universidades Lasalle y Simón Bolívar. Miembro del Consejo Directivo de Razón y Palabra.

(2011)

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