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Agosto 2002

 

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Comunicación y la Telaraña

Sólo para hombres: tecnología y feminismo

 
Por Edgar Gómez
Número 28

Ser mujer en un mundo de hombres
El otro día escuché casualmente una conversación entre un padre y su hijo, al final de la cual éste último le preguntaba a su progenitor "¿y que pasaría si fuéramos niñas?" a lo que el padre respondió con una mezcla de preocupación y alivio "no mijo, así estamos bien".

Una amiga me dijo algún día. "No sabes lo difícil que es levantarse cada día siendo mujer en un mundo de hombres" y aunque ha habido grandes avances en la búsqueda de la equidad, el mundo sigue siendo territorio principalmente masculino. Recuerdo una viñeta de Mafalda en la que piensa en mujeres de diversas épocas y las ve limpiando el piso, la casa, etc. Al final de la viñeta dice (palabras más, palabras menos) "el problema es que en lugar de un papel, la mujer ha jugado un trapo en la historia". Esto parece estar cambiando a pasos firmes, pero todavía es un largo camino el que hay que recorrer. En lo que se refiere a las tecnologías, por lo menos, la participación femenina en la producción, reflexión y construcción de las nuevas tecnologías está todavía en una fase primaria a pesar de que hay mujeres (y hombres) empeñadas en cambiar esa situación. Para ellas va esta pequeña reflexión (y para ellos también).

Mujeres y tecnologías
La historia de la tecnología no ha sido precisamente escrita por mujeres (y casi ninguna de hecho), y si hablamos de las computadoras y el Internet la mujer no ha estado presente en la consolidación de éstos (aunque la primera programadora de la historia fue una mujer, Ana Lovelace quien trabajó con Charles Babbage a finales del siglo XIX). Lelia Green, en su libro "Communication, Technology and Society"1, habla de que la tecnología es predominantemente masculina y de que aunque cocinar o la jardinería (así como otras actividades tradicionalmente femeninas) utilizan tecnologías, ástas no se consideran como "tecnologías", parcialmente porque "en nuestra cultura son todas actividades femeninas (los hombres que desarrollan habilidades de jardinería profesionales tienden a verse a sí mismos como horticultores, arquitectos de paisajes, gerentes de la tierra y granjeros " (p. 171). Ella habla de que muchas tecnologías de servicio están relacionadas con lo femenino mientras que las tecnologías de poder y elección están relacionadas con lo masculino. Desgraciadamente en los ámbitos cotidianos esto se ve muy claro cuando la mamá le pide al hijo que programe el microondas, cuando la abuela le pide al nieto que le grabe su telenovela o cuando la esposa, en una conversación con amigas, al ser cuestionada sobre su uso de la computadora, dice "No, ésas son cosas de hombres".

Algunas de mis alumnas acaban de concluir un trabajo de tesis sobre la forma en la que los y las estudiantes de universidad usan y se apropian del teléfono celular. Aunque en proporción parece haber un balance entre hombres y mujeres en lo que respecta a la tenencia de teléfonos celulares, el problema viene cuando se habla de conocer a fondo el aparato. En este sentido, las mujeres señalaron que los hombres son los que conocen a fondo las funciones de sus teléfonos mientras que ellas sólo los usan para hablar. Esto mismo se ha encontrado en diversas investigaciones sobre el uso y la apropiación de tecnologías (incluso las del hogar). Me parece importante que las mujeres entiendan que utilizar elementos tecnológicos las llevará en algún momento a participar en su creación y desarrollo tomando en cuenta sus necesidades específicas..

Internet: Mujeres, datos y desigualdad2
Cuando se habla de Internet se suele hablar de un espacio democrático en donde las desigualdades de raza, de género y físicas son superadas por el anonimato y el intelecto. Esto no es completamente cierto según varias autoras y autores.

En Estados Unidos, el país con mayor número de usuarios en el mundo, las cifras hablan de casi un 50% de mujeres usuarias. Según un estudio de América On Line (AOL) en Estados Unidos, las madres con conexión a Internet pasan un promedio de 20 horas por semana en línea (más que las 18 horas promedio de los adolescentes) y sin duda son un mercado meta muy importante para las compañías de acceso a Internet. Así mismo, en Europa, las estadísticas señalan que hay casi 25.1 millones de usuarias por 40 millones de usuarios. En Latinoamérica la balanza se inclina hacia el lado masculino en casi una proporción de 70% de usuarios hombres. Sin embargo, las estadísticas no son claras a la hora de ver cómo usan el Internet los hombres y las mujeres, aunque hay algunas pistas; por ejemplo, las mujeres utilizan más los sistemas de mensajeros en Latinoamérica que aquellas que los usan en Europa en relación a los usuarios hombres. Aunque existen factores más importantes en la conectividad a Internet, como el estatus económico, la preparación escolar y la edad, las inequidades de género permanecen como una barrera más que derribar en la búsqueda de un Internet global y democrático. La "cultura computacional" es predominantemente masculina, al grado que hay mujeres que no saben cómo abrir su correo, correr una aplicación o instalar un programa (en lo cual insisto, el género es un más de los elementos de diferenciación).

Hablando, por ejemplo, específicamente de los chats, las mujeres se enfrentan a los mismos problemas que en la vida real: acoso sexual y abuso de poder: de hecho se han documentado casos de violaciones en línea (cuando un personaje en un MUD3 fue obligada a entablar una relación sexual sin el consentimiento de la persona que creó ese personaje), de acoso sexual por medio del correo electrónico o de uso del nombre de una chava en un grupo de discusión sobre prácticas sexuales extremas.

Ahora, como contraparte, las mujeres encuentran en el Internet un espacio para intercambiar información, organizarse, crear, abrir sus perspectivas y trabajar en conjunto y cada vez son más las mujeres que están en línea. El siguiente paso es crear contenidos en la red que sirvan de contrapeso a la participación mayoritariamente masculina, tanto en la producción de páginas web, como en la participación en foros de discusión y chats.
Hay un largo camino por recorrer pero la lucha por la igualdad sigue y hay que pelearla tanto hombres como mujeres.

Nota no feminista de última hora (a propósito de San Juan Diego)
Ya está casi lista la nominación del primer santo de Internet (no será Santa Tecla como podría pensar el lector y la lectora): será Isidoro de Sevilla, creador de la primera enciclopedia, en el siglo VI. Pronto, si su servidor se cae, un virus infecta su computadora, se quema el MODEM y cosas por estilo, podrá rezarle a este santo patrono.

Posdata a manera de invitación
Actualmente dirijo una investigación sobre el uso sexual de la comunicación mediada por computadora (cibersexo) y, con la ayuda de Razón y Palabra, hemos construido el sitio del proyecto. Ojalá pudiera visitarlo, sus comentarios y ayuda son fundamentales para el trabajo que pretendemos desarrollar. La dirección es:
<http://www.razonypalabra.org.mx/cibersexo/index.html
>


Notas:

1 Sage Publications, 2002.
2 Los datos estadísticos fueron extraídos de <http://cyberatlas.internet.com>
3 Multi User Domain (Dungeon). Es un tipo de sistema de comunicación mediada por computadora en donde los participantes "crean" un mundo utilizando un lenguaje de programación.


Mtro. Edgar Gómez
Profesor-investigador en la la Facultad de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima, México. Se ha dedicado a investigar la cibercultura desde hace 5 años. Ha escrito textos sobre Comunicación Internacional, Comunidades Virtuales y la Comunicación Mediada por Computadora (CMC) en diversas publicaciones. Es colaborador del laboratorio para la Cibersociedad y es coproductor de un programa de radio de músicas del mundo

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