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Por Edgar Gómez
Número 28
Ser mujer en un
mundo de hombres
El otro día escuché casualmente una conversación
entre un padre y su hijo, al final de la cual éste último
le preguntaba a su progenitor "¿y que pasaría
si fuéramos niñas?" a lo que el padre respondió
con una mezcla de preocupación y alivio "no mijo, así
estamos bien".
Una amiga me dijo algún
día. "No sabes lo difícil que es levantarse cada
día siendo mujer en un mundo de hombres" y aunque ha
habido grandes avances en la búsqueda de la equidad, el mundo
sigue siendo territorio principalmente masculino. Recuerdo una viñeta
de Mafalda en la que piensa en mujeres de diversas épocas
y las ve limpiando el piso, la casa, etc. Al final de la viñeta
dice (palabras más, palabras menos) "el problema es
que en lugar de un papel, la mujer ha jugado un trapo en la historia".
Esto parece estar cambiando a pasos firmes, pero todavía
es un largo camino el que hay que recorrer. En lo que se refiere
a las tecnologías, por lo menos, la participación
femenina en la producción, reflexión y construcción
de las nuevas tecnologías está todavía en una
fase primaria a pesar de que hay mujeres (y hombres) empeñadas
en cambiar esa situación. Para ellas va esta pequeña
reflexión (y para ellos también).
Mujeres y tecnologías
La historia de la tecnología no ha sido precisamente escrita
por mujeres (y casi ninguna de hecho), y si hablamos de las computadoras
y el Internet la mujer no ha estado presente en la consolidación
de éstos (aunque la primera programadora de la historia fue
una mujer, Ana Lovelace quien trabajó con Charles Babbage
a finales del siglo XIX). Lelia Green, en su libro "Communication,
Technology and Society"1,
habla de que la tecnología es predominantemente masculina
y de que aunque cocinar o la jardinería (así como
otras actividades tradicionalmente femeninas) utilizan tecnologías,
ástas no se consideran como "tecnologías",
parcialmente porque "en nuestra cultura son todas actividades
femeninas (los hombres que desarrollan habilidades de jardinería
profesionales tienden a verse a sí mismos como horticultores,
arquitectos de paisajes, gerentes de la tierra y granjeros "
(p. 171). Ella habla de que muchas tecnologías de servicio
están relacionadas con lo femenino mientras que las tecnologías
de poder y elección están relacionadas con lo masculino.
Desgraciadamente en los ámbitos cotidianos esto se ve muy
claro cuando la mamá le pide al hijo que programe el microondas,
cuando la abuela le pide al nieto que le grabe su telenovela o cuando
la esposa, en una conversación con amigas, al ser cuestionada
sobre su uso de la computadora, dice "No, ésas son cosas
de hombres".
Algunas de mis alumnas acaban de
concluir un trabajo de tesis sobre la forma en la que los y las
estudiantes de universidad usan y se apropian del teléfono
celular. Aunque en proporción parece haber un balance entre
hombres y mujeres en lo que respecta a la tenencia de teléfonos
celulares, el problema viene cuando se habla de conocer a fondo
el aparato. En este sentido, las mujeres señalaron que los
hombres son los que conocen a fondo las funciones de sus teléfonos
mientras que ellas sólo los usan para hablar. Esto mismo
se ha encontrado en diversas investigaciones sobre el uso y la apropiación
de tecnologías (incluso las del hogar). Me parece importante
que las mujeres entiendan que utilizar elementos tecnológicos
las llevará en algún momento a participar en su creación
y desarrollo tomando en cuenta sus necesidades específicas..
Internet: Mujeres, datos y desigualdad2
Cuando se habla de Internet se suele hablar de un espacio democrático
en donde las desigualdades de raza, de género y físicas
son superadas por el anonimato y el intelecto. Esto no es completamente
cierto según varias autoras y autores.
En Estados Unidos, el país
con mayor número de usuarios en el mundo, las cifras hablan
de casi un 50% de mujeres usuarias. Según un estudio de América
On Line (AOL) en Estados Unidos, las madres con conexión
a Internet pasan un promedio de 20 horas por semana en línea
(más que las 18 horas promedio de los adolescentes) y sin
duda son un mercado meta muy importante para las compañías
de acceso a Internet. Así mismo, en Europa, las estadísticas
señalan que hay casi 25.1 millones de usuarias por 40 millones
de usuarios. En Latinoamérica la balanza se inclina hacia
el lado masculino en casi una proporción de 70% de usuarios
hombres. Sin embargo, las estadísticas no son claras a la
hora de ver cómo usan el Internet los hombres y las mujeres,
aunque hay algunas pistas; por ejemplo, las mujeres utilizan más
los sistemas de mensajeros en Latinoamérica que aquellas
que los usan en Europa en relación a los usuarios hombres.
Aunque existen factores más importantes en la conectividad
a Internet, como el estatus económico, la preparación
escolar y la edad, las inequidades de género permanecen como
una barrera más que derribar en la búsqueda de un
Internet global y democrático. La "cultura computacional"
es predominantemente masculina, al grado que hay mujeres que no
saben cómo abrir su correo, correr una aplicación
o instalar un programa (en lo cual insisto, el género es
un más de los elementos de diferenciación).
Hablando, por ejemplo, específicamente
de los chats, las mujeres se enfrentan a los mismos problemas que
en la vida real: acoso sexual y abuso de poder: de hecho se han
documentado casos de violaciones en línea (cuando un personaje
en un MUD3 fue obligada a entablar
una relación sexual sin el consentimiento de la persona que
creó ese personaje), de acoso sexual por medio del correo
electrónico o de uso del nombre de una chava en un grupo
de discusión sobre prácticas sexuales extremas.
Ahora, como contraparte, las mujeres
encuentran en el Internet un espacio para intercambiar información,
organizarse, crear, abrir sus perspectivas y trabajar en conjunto
y cada vez son más las mujeres que están en línea.
El siguiente paso es crear contenidos en la red que sirvan de contrapeso
a la participación mayoritariamente masculina, tanto en la
producción de páginas web, como en la participación
en foros de discusión y chats.
Hay un largo camino por recorrer pero la lucha por la igualdad sigue
y hay que pelearla tanto hombres como mujeres.
Nota no feminista de última
hora (a propósito de San Juan Diego)
Ya está casi lista la nominación del primer santo
de Internet (no será Santa Tecla como podría pensar
el lector y la lectora): será Isidoro de Sevilla, creador
de la primera enciclopedia, en el siglo VI. Pronto, si su servidor
se cae, un virus infecta su computadora, se quema el MODEM y cosas
por estilo, podrá rezarle a este santo patrono.
Posdata a manera de invitación
Actualmente dirijo una investigación sobre el uso sexual
de la comunicación mediada por computadora (cibersexo) y,
con la ayuda de Razón y Palabra, hemos construido el sitio
del proyecto. Ojalá pudiera visitarlo, sus comentarios y
ayuda son fundamentales para el trabajo que pretendemos desarrollar.
La dirección es:
<http://www.razonypalabra.org.mx/cibersexo/index.html>
Notas:
1
Sage Publications, 2002.
2 Los datos estadísticos
fueron extraídos de <http://cyberatlas.internet.com>
3 Multi User Domain (Dungeon).
Es un tipo de sistema de comunicación mediada por computadora
en donde los participantes "crean" un mundo utilizando
un lenguaje de programación.
Mtro.
Edgar Gómez
Profesor-investigador en la la Facultad de
Letras y Comunicación de la Universidad
de Colima, México. Se ha dedicado a investigar la cibercultura
desde hace 5 años. Ha escrito textos sobre Comunicación
Internacional, Comunidades Virtuales y la Comunicación Mediada
por Computadora (CMC) en diversas publicaciones. Es colaborador del
laboratorio para la Cibersociedad y es coproductor de un programa
de radio de músicas del mundo |