Por Felipe Monteros
Número 30
Introducción
No es necesario citar lo que
todos ya conocen. Que las TIC's se han convertido en una plataforma
comunicativa e interaccional inmensa, y que el acceso a estas tecnologías
ha avanzado a pasos agigantados en los últimos años
no sorprende a nadie. La actual etapa de los soportes comunicativos
virtuales debiera tener su acento en la innovación y descubrimiento
de las múltiples carencias que a la red todavía le
quedan. Este es el caso de los periódicos estudiantiles digitales,
quienes se convierten en una de las mejores maneras para informar
al interior de una comunidad determinada y expresar lo que un grupo
que siempre se vio limitado por la falta de un medio y de recursos
para elaborar una publicación, quisiese saber y decir.
Aprovechando el auge que las comunicaciones
tomaban, aparte de la infraestructura que se comenzaba a implementar
en la Universidad, un grupo de estudiantes de Periodismo pertenecientes
a la Universidad de La Frontera, lanzaron el año 1998 una
iniciativa que fue aceptada a tropiezos, en un comienzo, por la
casa de estudios. Propusieron crear una revista netamente estudiantil,
donde la crítica y la información se mezclaran, constituyendo
una totalidad tendiente a informar a la comunidad universitaria
de manera diferente y abrir la discusión sobre temas de los
que pocos tenían conocimiento debido a su hermetismo. Así
nació el Stuka Rakuda, el primer periódico digital
estudiantil de Chile, mostrando a los entonces incipientes cibernautas
de que con innovación es posible llevar a cabo las más
diversas labores.
Durante sus 5 años de existencia,
este medio ha logrado posicionarse en el ámbito universitario
como el canal de expresión e información que los estudiantes
tienen frente a lo que pasa en la Ufro, así como una escuela
de todos los Estudiantes que trabajan en las diversas áreas
productivas de esta publicación con carácter mensual
(Siempre que las condiciones lo permitan).
Describiendo al Stuka Rakuda
A lo largo de la historia
de este medio el cambio ha sido la única constante. Se partió
elaborando una publicación web basada en la tecnología
y los conocimientos que se manejaban en ese entonces. Era un diseño
simple, cuyo mayor fuerte eran las temáticas que abordaba.
Distaba de ser atractiva visualmente y sus mayores novedades consistían
en unos cuantos Gif's animados que se paseaban burlescamente por
la pantalla. Con la marcha del tiempo se pudo mejorar el diseño,
pero todavía bajo las limitadas posibilidades que Frontpage
determinaba para sus usuarios. Con la aparición de programas
como Dreamweaver ("Tejedor de sueños", como es
su traducción), Flash y Freehand, por parte de Macromedia;
y Photoshop por Adobe, la apariencia del Stuka comenzó a
variar paulatinamente. Empezó a tener un look un tanto más
profesional y un diseño más atractivo. Los contenidos
siguieron siendo los mismos y se comenzó a posicionar como
el medio alternativo dentro de nuestra casa de estudios. Hoy en
día presenta una cara muy distinta a la que tuvo en un comienzo.
Se ha tratado de ir a la par con el avance de los nuevos softwares
que salen al mercado y las tendencias que la red muestra día
a día en innovación y recursos.
El equipo que compone el periódico
está formado por 7 estudiantes de periodismo de diversos
niveles, dentro de los cuales 5 escriben reportajes habitualmente,
uno es editor de las secciones y otro el editor general.
Sobre las condiciones infraestructurales
La implementación
de un periódico digital estudiantil en un comienzo se veía
como algo difícil de lograr debido al escaso acceso a computadores
y conexiones a internet que existían en la universidad. La
idea no fue tan bien recibida, pero con un poco de testarudez y
empuje se logró finalmente desarrollar la idea. Los alumnos
comenzaron a leer la publicación en la computeca y unos pocos
computadores que se encontraban en poder de diversas carreras dentro
de la universidad.
Posteriormente, a mediados del año
1998, se logra la que la casa de estudios proporcionara un mayor
número de equipos, así como un mejoramiento sustancial
en la calidad de la conexión existente, la cual puede llegar
a tener una taza de tranferencia promedio de 500 kb/seg en la actualidad.
Las carreras de la Ufro comenzaron
a implementar sus propias salas de computación con libre
acceso a los estudiantes, e internet se comenzó a hacer más
masivo entre la comunidad. Posteriormente, en el año 2002
se instalaron una serie de computadores de libre acceso en los pasillos
de los diversos campus, cada uno conectado a la red, permitiendo
que el uso de estas tecnologías se hiciera masivo al fin.
Salta a la vista que sin estos avances
infraestructurales hubiera sido difícil imaginarse a un periódico
digital estudiantil funcionando. Hoy en día un gran grupo
de estudiantes se pone en contacto con nosotros para que publiquemos
noticias relevantes a la vida universitaria, y el Stuka se mantiene
mediante un masivo grupo de lectores que no solo pertenecen a nuestra
casa de estudios, sino también una serie de ex alumnos que
se han encargado de difundir lo que hacemos y mostrar una cara de
la U que pocas veces es posible ver.
Proceso de elaboración
La estructura que se utiliza
en el Stuka Rakuda está ordenada de la siguiente manera.
Existe un equipo de 5 periodistas estables, un webmaster, un editor
general y un director, que en este caso es un profesor de la carrera
de periodismo que se encarga de supervigilar el trabajo. Por otro
lado están una serie de suplementos que tienen vida propia.
Existen secciones de cine, comics, fotografía, música
y literatura. Cada uno cuenta con su propio equipo de periodistas
y un editor. Su trabajo pasa por un editor de secciones, quien después
lo traspasa al editor general para que coordine el armado de cada
suplemento.
A pesar de que el Stuka mantiene
una vida aparte de las secciones, se ha decidido mantenerlas dentro
como una forma de entregar información relevante a los diversos
grupos de interés que existen en la universidad.
Es necesario recalcar algo que todos
los periodistas digitales debieran tener más que presente.
Al trabajar con un grupo tan heterogéneo, donde se mezclan
los conocimientos en periodismo e informática entre comunicadores
e ingenieros, se hace de vital importancia homologar conocimientos
entre las partes. Los conceptos que muchas veces manejan los ingenieros
nos parecen un idioma perdido en el tiempo, así como las
indicaciones de las estructuras informativas que deben llevar los
reportajes en el armado de las páginas para ellos. Mantener
un contacto estrecho con los webmasters e instruirse mutuamente
en el manejo de conocimientos específicos de cada área,
hace que el funcionamiento y el producto final que se obtenga sea
de la mejor calidad posible, así como también permite
la disminución en los tiempos de armado y levantamiento del
medio. Es por eso que hemos procurado tener la mejor comunicación
y entendimiento con todo nuestro equipo, aprendiendo parte de las
terminologías y las posibilidades que los distintos softwares
proporcionan a sus usuarios.
También es importante señalar
que nuestro periódico ha querido ser siempre una escuela
para quienes trabajan en él. De esta manera tanto los ingenieros
como los periodistas han podido asistir a variados encuentros dentro
de sus áreas con el fin de potenciar sus conocimientos y
hacer de ellos mejores profesionales a futuro.
Rol de un periódico electrónico
estudiantil
En la Universidad de La
frontera existen diversas publicaciones tendientes a mantener informada
a la comunidad universitaria acerca de lo que está pasando
en su entorno diario. Está el periódico institucional
"Vertientes", que tiene una línea más bien
oficialista de la universidad y se reparte mayoritariamente entre
los funcionarios; 7 Días, otra iniciativa estudiantil cuya
base es la información dirigida al estudiantado preferentemente;
y el Stuka Rakuda, cuyo objetivo, más que informar, es crear
conciencia acerca de lo que se está haciendo mal o bien al
interior del Alma Mater. Su rol esencial es publicar reportajes
cuyo contenido informe y contenga un cierto grado de crítica
acerca de algunos fenómenos ocurridos en un sistema tan complejo
como la Ufro. Es este mismo hecho el que a nuestra manera de ver
contribuye en el mediano plazo a mantener el entendimiento universitario
y una convivencia sana y armónica en nuestra casa de estudios.
Damos a conocer pequeñas falencias que a largo plazo tan
solo causan descontento y disconformidad. Es así como cada
reportaje contribuye a que las autoridades logren ver cosas que
debido a sus apretadas agendas no les es posible conocer. Y no tan
solo estamos refiriéndonos al rector y su equipo, sino también
a las autoridades estudiantiles como centros de alumnos y federación
de estudiantes.
Hablando de teorías referidas
a la Comunicación Social, nuestro medio se encasillaría
dentro de lo que los teóricos llaman Teorías Estratégicas,
es decir, todas aquellas que ven al periodismo como un instrumento
de acción social, con influencia en el curso de los acontecimientos
y en la formación de la opinión pública. En
otras palabras, se entiende al periodismo como inductor de las conductas
sociales y, especialmente, como manipulador de la opinión
o de la realidad como servidor de los intereses en juego.
Sería ingenuo no ver en la existencia de los medios de comunicación
un sostenedor o impugnador de las fuerzas sociales.
Principalmente creemos que nuestra
postura apunta a ver al periodismo como un aporte al desarrollo
social, como un contrapoder, una fuerza crítica que sirve
especialmente a los intereses de los que no tienen voz.
Muestra de un trabajo Stukiano
Tipo
A continuación
se muestra un reportaje del tipo standard que se ofrece en nuestro
medio. En general no nos regimos por un tipo definido de estructura
al escribir, pero el lineamiento principal es poner en evidencia
falencias que presenta nuestra casa de estudios con el fin de encontrar
soluciones.
LA UNIVERSIDAD POR FUERA
Cómo estamos... o cómo cree la gente que estamos.
Por Paula Guerra
Las universidades son consideradas
por la mayoría de las personas como centros de formación,
que combinan la educación con los valores y cuna de grandes
profesionales. Para aquellos que viven la realidad universitaria
más de cerca, la cosa no es tan así. En nuestro caso,
donde estamos emplazados en medio de un poblado sector residencial,
sería importante conocer la opinión que los vecinos
tienen de la Ufro, considerando que los jóvenes universitarios
no sólo son entes dedicados al estudio.
En todo el sector aledaño
a los campus Valentín Letelier y Andrés Bello hay
casas que dan pensión, departamentos y propiedades particulares
son arrendadas por estudiantes, sin olvidar los almacenes y casas
donde se venden los típicos completos a doscientos pesos.
Pero no todos están contentos con esta cercanía, y
justamente aquellos que no se sienten favorecidos, son sus principales
detractores. Son los que lloran sin motivo aparente cuando el gas
lacrimógeno invade sus hogares los que se sienten con el
derecho de exigir lo que es justo. Al menos así se reconoce
en una carta que enviaron las juntas de vecinos del sector a diferentes
organismos, en la que dicen estar "a favor de la libre expresión,
pero también exigimos esa misma consideración, de
tal forma que podamos convivir en paz".
¿Sustento económico
o antro de volados?
El dueño de un conocido
negocio cercano a la universidad, nos explica que para él
es bastante beneficioso vivir cerca de un campus universitario,
ya que la casa de estudios aporta económicamente a la población
más de lo que sus habitantes creen: "Para mí
es super notorio, en el verano por ejemplo, la gente de las pensiones
no tiene plata. Yo me doy cuenta porque casi siempre me piden fiado.
Para mí es importante, porque yo también arriendo
un departamentito acá atrás de mi casa. Cuando llega
marzo, se arreglan las cosas, no sé cómo no se dan
cuenta todavía de lo necesaria que la U puede ser".
Pese a esto, reconoce que tiene ciertos riesgos y molestias, sobretodo
cuando se producen desórdenes frente a la entrada, cuando
los estudiantes escapan hacia los pasajes, los carabineros se toman
las calles y las lacrimógenas hacen lo suyo. "De todas
maneras, eso no pasa todos los días. El problema es que tenemos
que cerrar, las ventas bajan y se junta mucho vandalismo en este
sector", señala la dueña de otro almacén
cercano.
Está claro que no se puede
hacer un análisis si no conocemos la parte contraria, aquellos
que sin tapujos definen a la universidad como un "antro de
borrachos, volados y flojos", tal como lo hizo una pobladora
de 60 años cuya identidad se negó a revelar. "Estos
cabros dejan la tendalada en el invierno. Por culpa de ellos los
niños no pueden salir a la calle porque les puede llegar
un piedrazo, o respiran esa cuestión, nos cortan la luz y
se llena de delincuentes, porque los estudiantes comienzan todo
pero después se llena de vándalos que llegan de las
poblaciones de acá abajo".
También es cierto que apenas
llegan los días primaverales, aparecen en las áreas
verdes de los campus aquellos quienes gozan de la naturaleza junto
a la infaltable cervecita - y a veces otras "cosillas"-,
no podemos dejar de decir que es una casa de estudios de más
de 8 mil alumnos y no se puede ni se debe generalizar al respecto.
Hombres de poca fe...
Respecto de esta situación
se han tomado diferentes medidas que apuntan a mejorar la convivencia
de vecinos y universitarios. Para acabar con las molestias, perturbaciones
y daños cerca de la casa de estudios, se han enviado cartas
y se han llevado a cabo cerca de diez asambleas donde participan
las diferentes Juntas de Vecinos del sector y la rectoría
de la universidad. En noviembre del año pasado, el rector
de la UFRO, Heinrich von Baer, hizo un llamado a terminar con los
hechos de violencia y desórdenes mediante una carta a la
comunidad universitaria. En ella se refiere al consumo de alcohol
y drogas dentro del recinto, hechos que según él "derivan
en actitudes groseras y en muchos casos violentas, que no se ajustan
a la responsabilidad de un estudiante universitario" haciendo
alusión a las continuas protestas que se llevan a cabo durante
el año. Consultados varios alumnos antiguos de la universidad
acerca de esta carta, dijeron no tener conocimiento de ella. O si
la vieron, no la leyeron, porque simplemente la encontraron larga.
Las conversaciones de los dirigentes
vecinales con Carabineros y otros organismos como la Gobernación
Provincial y el Alcalde, aún no han encontrado una solución
definitiva acerca de las medidas que se tomarán a futuro.
Así lo recalca Nicanor Astorga, presidente de la Junta de
Vecinos de la Villa Pumalal. "A nosotros nos tienen con puras
soluciones de parche. El rector ha accedido a conversar con nosotros
sin ningún problema, pero de soluciones... nada. Siempre
dice que no nos preocupemos, que Carabineros se hace cargo de esto
sin problemas, que todo va a cambiar pronto. Hemos hablado con Carabineros,
pero no es la gracia que esto se transforme en una contienda más
grande. Ellos nos dijeron que iban a actuar de otra manera pero
lo que hemos visto hasta ahora es casi lo mismo de siempre. Todavía
estamos peleando por esta situación". Astorga además
mencionó un posible cierre de la entrada principal de la
UFRO ubicada en Francisco Salazar, la que sería trasladada
a calle Uruguay, lo cual aún no se ha confirmado.
La Prefectura de Carabineros de
Cautín, en carta enviada a la Gobernación el 17 de
enero de este año, informa un nuevo plan de acción
que contempla principalmente la actualización del Plan Centinela,
por lo que se confeccionó un proyecto de adquisición
de nuevos equipos portátiles que se presentó a la
Municipalidad y que, de ser aprobado, estos equipos serían
entregados a personas responsables de la comunidad sector UFRO,
a fin de estar en contacto con los efectivos cuando se produzcan
manifestaciones.
Frases para el bronce
Es necesario dejar en claro
que los sujetos que inician los desmanes están contados con
los dedos de una mano. No podemos echarle la culpa a grupos colectivos
estudiantiles existentes dentro de la universidad tal como lo han
planteado algunos medios, y menos al alumnado en general. La imagen
de la Universidad de la Frontera no sólo es responsabilidad
de los alumnos, sino también de todo lo que incluye el término
"comunidad universitaria". Tal vez deberían crear
un "protestódromo" como lo sugirió don Nicanor
Astorga, "para no molestarnos a nosotros, sus vecinos".
Y respecto de los relajos que se observan desde fuera, solo queda
rescatar la opinión de la dueña de un local comercial
quien dijo: " Cuando hay que estudiar, estudian; cuando hay
que celebrar celebran. Yo creo que los jóvenes saben manejar
eso, no son tontitos, por algo están en la universidad, ¿o
no?".
Conclusiones
Una universidad es un
sistema demasiado complejo como para que cada una de sus partes
se maneje de manera individual. Es por eso que deben haber entes
tendientes a la distribución de información y a la
creación de masa critica que ayude a mejorar lo que se tiene.
Creemos que la existencia de un
medio con estas características es vital para mantener el
entendimiento entre las partes que conforman este sistema. Una buena
dosis de crítica acompañada de propuestas de solución
puede hacer que la gran parte de los conflictos que se crean entre
estudiantes y autoridades se resuelvan mediante el ejercicio del
dialogo.
A pesar de todos los problemas que
hemos tenido para que cada edición salga a la red, y que
muchas veces las autoridades universitarias se sientan molestas
con lo que se publica, recibimos el apoyo de esta. En innumerables
ocasiones los reportajes que hemos publicado les ha hecho tomar
conciencia de lo que se puede mejorar, así también
de las cosas rescatables que tiene la Universidad de La Frontera.
Entendemos que nuestra labor no
es fácil, pero es el amor por lo que hemos escogido estudiar
lo que nos permite que mes a mes estemos con nuestras palabras apuntando
a las conciencias de cada persona que lee nuestra publicación,
esperando ser un modelo para el resto de las universidades y que
cada una de ellas se anime a poder crear un medio similar al que
nosotros hemos podido sostener.
Felipe
Monteros Viveros
Editor General, Periódico
digital estudiantil Stuka Rakuda, Universidad
de la Frontera, Chile |