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Por Sergio de la Rosa
Número 40
El día de
ayer, 29 de agosto del 2004, asistí a mi primer gran marcha
en contra del desafuero del jefe de gobierno del Distrito Federal,
Andrés Manuel López Obrador. Al filo de las diez de
la mañana llegué al Ángel de la Independencia
y mi primer sorpresa fue encontrar la avenida de Reforma plagada
de contingentes en su mayoría grupos civiles como: El Barzón,
La Asamblea de Barrios y otros representativos de gobiernos perredistas
provenientes de Zacatecas, Tabasco, grupos de indígenas,
campesinos, obreros, constructores, músicos entre los más
numerosos. Para mi sorpresa había también un gran
número de ciudadanos de todas las clases sociales que en
mi opinión, asistieron por propia voluntad y libertad de
ejercer su derecho a manifestarse dándole voz a la sociedad
civil lo cual es fundamental para el buen desarrollo de la vida
política del país.
Habían niños, adultos,
ancianos, discapacitados, jóvenes universitarios, que como
yo cargaban su cámara y hacían labor periodística
tan urgente en México, sobretodo cuando ésta, es honesta,
objetiva y responsable.
En todo el recorrido me encontré
con muchos vendedores que comercializaban productos de identidad
con el propósito de la marcha, en particular con AMLO. De
sombreros, gorras, globos, banderas, playeras, opté por adquirir
un paliacate amarillo de veinte pesos con el logotipo del PRD, y
con la frase “en contra del desafuero” que era la misma
que la mayoría de mantas, pancartas, playeras y demás
artículos de consumo llevaban impresa.
Recordé haber escuchado en
la semana declaraciones acerca de la marcha, en particular de los
grupos acarreados que iban a asistir obligados, lo que me pareció
un tanto ilógico calculando que habían más
de cien mil personas y que lejos de una actitud pasiva, demostraban
gritando, bailando, cantando y manifestándose en contra del
gobierno Foxista, con algunos versos poco sutiles pero muy divertidos
como “ocho, ocho, ocho, Manuel es un bizcocho, cero, cero,
cero, Vicente es un culero” o “no somos uno ni somos
cien pinche Vicente cuéntanos bien” o “el que
no brinque es priísta” o panista en su caso.
Aproximadamente a las doce y media
de la tarde crucé el eje central y me dirigí rumbo
a la plancha del Zócalo por la avenida Francisco I. Madero,
que era de las avenidas menos llenas y aún así resultaba
difícil de transitar por el gran número de personas
que llegaban de todos los estados de la república para hacer
quórum en apoyo a Andrés Manuel.
Al llegar al Zócalo fue impresionante
ver que no cabía ni un alma y que la gente seguía
llegando, la catedral, el palacio de gobierno, y los otros edificios
aledaños ofrecían una vista espectacular, muchas personas
salían de las terrazas y gozaban de una vista envidiable
ya que abajo hacía muchísimo calor y no podías
moverte ni un centímetro. De todos lados se descolgaban mantas,
se escapaban globos amarillos, se agitaban banderas del partido
y de México y se pedía la presencia de AMLO quien
llegaría casi dos horas después de lo planeado. En
lo que tardaba en llegar el jefe de gobierno del D.F., una mujer,
desconozco su nombre, para hacer tiempo, hablaba de la deuda de
un billón doscientos mil millones de pesos del FOBAPROA que
se supone que yo por ser mexicano cuando empiece a pagar impuestos
tendré que sanear, después comenzó a hablar
de las supuestas irregularidades del caso del encino, de complots,
y maniobras políticas y otros temas que no me gustaría
profundizar por no ser mi intención en ésta crónica
el análisis político sino más bien un recuento
del suceso tan importante y trascendente para los sucesos políticos
nacionales de los próximos años.
La gente se comenzaba a impacientar
y pedían la presencia del “PG”. El helicóptero
de Televisa y de seguridad pública sobrevolaban y por las
bocinas pedían a la gente que se recorrieran ya que necesitaban
hacer un poco de espacio para que pudiera pasar Andrés Manuel
al mismo tiempo que denunciaban la parada de autobuses de contingentes
en las carreteras México – Toluca y Querétaro
por la policía federal. A la llegada de Andrés Manuel
la gente enloqueció, lo recibieron entre gritos de apoyo,
porras, abrazo y finalmente subió al templete, la mujer anunció
a Eugenia León que inició la ceremonia con una canción
postrevolucionaria de autor desconocido que animó a la gente,
al terminar de interpretarla, Eugenia se despidió de beso
del “PG” y entonces Leonel Godoy, el Presidente del
Partido de la Revolución Democrática, empezó
con un discurso tan largo que la gente comenzó a chiflar
y hacer señas de tijeras para que lo cortara. Al finalizar
con su discurso anunciaron a Andrés Manuel y la gente una
vez más enloqueció. Comenzó su discurso enfatizando
que es importante mantener un proyecto de partido y de nación
independientemente del candidato electo para el 2006, continuó
denunciando el complot político para su desafuero, se declaró
inocente de todo y denunció al gobierno federal por manipular
a la suprema corte y a la PGR para lograr enjuiciarlo, concluyó
con el proyecto que será propuesto para la campaña
presidencial del 2006 y que consiste en retomar los puntos históricos
más importantes propuestos por los grandes personajes de
la historia de México como José María Morelos
y Pavón, Benito Juárez, Francisco I. Madero, Lázaro
Cárdenas. De los puntos más importantes a destacar
fueron entre otros, el apoyo al campo, la mejora de la vida de los
pobres, el esclarecimiento del FOBAPROA ahora IPAB, el combate a
la delincuencia, y la no privatización de la industria eléctrica
y el petróleo.
Como el sonido no era muy bueno
opté por retirarme lo cuál fue bastante difícil
ya que seguían llegando personas y entonces supuse que la
marcha había rebasado en número a su referente, la
marcha por la seguridad. Por momentos me quedaba atascado sin poder
moverme y para cuando logré salir ya eran las tres y media
aproximadamente, camiones con bocinas transmitían el mensaje
con un sonido más claro y personas sentadas en las banquetas
escuchaban atentamente el discurso. Finalmente para concluir mi
jornada de una manera exitosa comí con mi madre y mi tío
en un restaurante en el centro con bufete y música de tríos
realmente exquisita, para mi sorpresa los medios no habían
cubierto la marcha en vivo pero aquí les muestro unas fotos
directas de lo que fue mi experiencia en ésta gran marcha
ciudadana.
Sergio
Peralta de la Rosa
Estudiante de Ciencias de la Comunicación, ITESM
Campus Estado de México, México |