La edad, sexo, clase social influye en la generación de comportamientos distintos frente a la televisión.

Iniciada en enero de este año y a punto de finalizar en diciembre próximo, fueron presentando en el ITESM Campus Estado de México, los primeros resultados preliminares de la Cátedra Televisa, dentro del evento "Jornadas Sobre Televisión y Vida Cotidiana". José Carlos Lozano Rendón, titular este proyecto, expresó a Razón y Palabra que esta investigación fue una iniciativa de Televisa cuyo propósito es el apoyar la investigación científica de la televisión mexicana, contrario a otro tipo de investigaciones con fines comerciales. Este trabajo "nos permite entender de una manera más completa él porque la televisión se ha vuelto hoy en día tan importante para todos los mexicanos".

José Carlos Lozano, titular de Cátedra Televisa

Comento que esta tarea dio inicio con la convocatoria que hiciera la televisora donde concursaron unas veinte universidades y la propuesta del ITESM fue la que, a juicio del jurado, fue la más adecuada.

Con un presupuesto asignado por la televisora de avenida Chapultepec de cien mil dólares, el doctor en Comunicación Internacional señaló que la propuesta planteada hablaba de estudiar a fondo, las audiencias de televisión en tres de las ciudades más importantes del país: Guadalajara, Monterrey y México, y estudiarlos simultáneamente de diferentes maneras.

Se realizaron combinaciones de metodologías, por un lado se utilizaron encuestas que permiten identificar los hábitos de público en cuanto a tipos de programas, horarios canales entre otros datos. Por otra parte, se usaron entrevistas cualitativas, además de agregar dentro de este proceso el uso de los focus groups con el fin de observar como la gente discute sobre lo que le gusta y le disgusta de la televisión, la forma que la integra en su vida y por separado se realizaron otros siete proyectos complementarios cuyo objetivo fue concentrar en una base de datos, los resultados de otras investigaciones sobre televisión y audiencias.

Todos los avances y resultados se han presentado en página en Internet de la Cátedra (http://www.mty.itesm.mx/dcic/catedra/), sitio de consulta para cualquier estudiante, profesor o investigador de las ciencias de la comunicación.

"La idea de la Cátedra es que esto datos puedan ser consultados y retomados en las clases, en los cursos, en las investigaciones", refirió.

Dentro de la investigación participaron tanto alumnos de licenciatura y maestría de comunicación de los campus Monterrey, Guadalajara y Estado de México, e incluso se están desarrollando seis tesis de maestrías, retomando varios de los datos arrojados por la investigación.

"el mismo programa de televisión es interpretado y apropiado de diferente manera"

Al ser cuestionado sobre qué le ha dejado a los estudiantes participar en Cátedra Televisa, el también director de la carrera de comunicación del campus Monterrey, señalo que el beneficio obtenido es que ellos puedan hacer investigación por sí mismos, ya que han aprendido la forma de aplicar las distintas herramientas usadas durante este proceso. Y en segundo lugar él poder contar con una visión más real y más cercana de los que sucede en la vida real, que realicen una comparación entre los textos que utilizan en sus clases teóricas, con lo que sucede en nuestra sociedad. Sobre la pregunta sobre sí considera que los contenidos presentados por la televisión mexicana son los adecuados para la gente, para su vida cotidiana, el titular de la cátedra expreso que dentro del ambiente académico existen muchas críticas y preocupaciones sobre la oferta televisiva. "nos gustaría que fuese más plural, más diversa, más amplia, que se le diese más acceso a diferentes actores sociales y creo que por ese lado es justo pedirle a la televisión mexicana que mejore en todos esos niveles".

Sin embargo, y en apego a los resultados que se obtuvieron de la investigación, la gente, con una oferta limitada es capaz de utilizar a la televisión para satisfacer distintas necesidades, qué es capaz de cuestionar lo que está viendo y ser selectivo. De igual forma es interesante observar como es congruente que "la clase social, el sexo y la edad influyen para (la generación de) comportamientos distintos frente a la televisión", lo que contradice a la creencia de que el público televisivo es homogéneo.

"Lo que nos dice esto (los resultados) es que incluso el mismo programa de televisión es interpretado y apropiado de diferente manera por alguien de clase baja que por alguien de clase alta; por alguien joven que por alguien adulto; un hombre o una mujer, y todo esto nos habla de una gran actividad semiótica en los receptores que nos hace ser optimistas en cuanto a aquellas viejas teorías de la manipulación ideológica", concluyó.